Cargill está trabajando en todo el mundo con organizaciones no gubernamentales (ONG) y otros aliados para ayudar a abordar la asistencia alimentaria y las necesidades médicas de emergencia causadas por el nuevo coronavirus.
En América Latina, la compañía está apoyando la labor de los Bancos de Alimentos de 12 países, entre otras acciones. Con 35 millones de dólares en especie y en productos, Cargil busca sumar a los esfuerzos de ayuda y recuperación de COVID-19 a través de asociaciones globales y regionales, donaciones de productos y donaciones personales de los empleados. Esta respuesta se guía por el propósito de alimentar al mundo de una manera segura, responsable y sostenible.
“Nos sentimos inspirados por los profesionales médicos, los socorristas, los trabajadores y los agricultores de nuestras comunidades que se aseguran de satisfacer nuestras necesidades esenciales”, dijo Michelle Grogg, vicepresidenta de responsabilidad corporativa y desarrollo sostenible de Cargill. “Nuestros pensamientos están con todos aquellos que han sido afectados por el virus mientras continuamos trabajando con nuestros socios en los esfuerzos de ayuda global y local”.
En Argentina, Cargill también se ha sumado a las iniciativas #ContagiemosSolidaridad y #SeamosUno a nivel de cámaras y asociaciones empresariales, articulando con ONG’s y autoridades, sobre todo para la asistencia social y alimentaria en las áreas metropolitanas de Rosario y Buenos Aires, así como acciones a nivel nacional con nuestros aliados GDFE y Fundación Bomberos.