Con el fin de conocer el estado de la contratación de personas con discapacidad en España, La Fundación Randstad ha llevado a cabo un estudio que se ha basado en los datos publicados por el Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) de enero a octubre entre 2010 y 2020. Asimismo ha tenido en cuenta la tipología del contrato de estos profesionales -indefinido y temporal-, y su comunidad autónoma.
El informe destaca que la crisis generada por la pandemia ha tenido una especial incidencia en la contratación de las personas con discapacidad, rompiendo con una tendencia positiva de siete años y provocando que este indicador del mercado laboral retroceda a niveles de 2014. Concretamente en lo que llevamos de año, los profesionales con discapacidad han firmado 71.404 contratos, un volumen que se ha desplomado un 28,6% en comparación con el año pasado, cuando se firmaron 100.003.
El estudio analiza la serie histórica y revela que entre 2010 y 2012 el volumen de contratos a personas con discapacidad se mantuvo alrededor de las 52.000 firmas. Desde entonces, este indicador registró siete años consecutivos de aumento, varios de ellos incluso por encima de los dos dígitos, hasta superar en 2019 los 100.000 contratos por primera vez en la historia. Pero en este 2020, las circunstancias han provocado que el volumen se desplome un 28,6%, registrando los 71.404 contratos actuales.
La investigación también analiza cuál es el tipo de contratación que ha habido, sobre esto el estudio destaca que durante los diez primeros meses de 2020, 13.078 profesionales con discapacidad firmaron un contrato indefinido en nuestro país, lo que supone el 18,3% del total de firmas, mientras que el 81,7% restante, es decir, 58.326 contratos, fueron temporales, un reparto de volúmenes similar al del año pasado. En comparación con 2019, los contratos indefinidos se redujeron en un 30,3% mientras que los temporales sufrieron una caída del 28,2%.
Asimismo, el estudio de la Fundación Randstad ha tenido en cuenta el lugar donde desarrolla el trabajador su labor. En términos generales muestra que todas las comunidades sufren caídas en su volumen de contratación de personas con discapacidad con respecto al año pasado, siendo las más acusadas las registradas en Canarias (-46,4%), Baleares (-39,4%), Catalunya (-36,4%), la Comunidad de Madrid (-35,2%) y Castilla y León (-30,8%), todas ellas por encima de la media nacional (-28,6%). Las caídas menos pronunciadas en contratación de personas con discapacidad se han registrado en Extremadura (-13,1%), Aragón (-17,6%), Galicia, Navarra (ambas con -21,9%), Andalucía y la Comunitat Valenciana (las dos con -21,4%).
María Viver, directora de la Fundación Randstad, asegura que “Este desplome de la contratación refleja que las personas con discapacidad están sufriendo especialmente la crisis laboral provocada por la pandemia. Desde la Fundación Randstad consideramos que la empleabilidad es fundamental para mejorar las condiciones de vida de las personas con discapacidad. De hecho, estos profesionales cuentan con unas habilidades y un talento de gran valor para las empresas. La mejor prueba de ello es que, como vemos en este estudio, aumenta la conversión de contratos temporales a indefinidos”.