Mientras Un Sol para los Chicos cumple 32 años en la Argentina, Unicef sigue afianzando sus alianzas con el sector privado, no solamente con acciones de recaudación, sino también con la promoción de políticas de cuidado dentro de las empresas. PRESENTE habló con Pablo Ferreyra, especialista en Alianzas Corporativas de la organización, quien aseguró que “hay una gran apertura y un gran campo de trabajo en acciones que generen compromiso de parte de las empresas y que permitan solventar proyectos”.
– ¿Cómo se relaciona Unicef con el sector privado desde el área de Alianzas Corporativas?
– La base conceptual del trabajo con el sector privado tiene que ver con lo que Unicef postula, que es trabajar por la defensa y el cumplimiento de los derechos de los chicos, las chicas y los adolescentes involucrando a los estados, la sociedad civil, las organizaciones y también el sector privado y la academia. El sector privado es una parte importante del logro de los objetivos relacionados con temas de infancia. Desde principios de la década de los 90, Unicef comenzó a trabajar con empresas en la Argentina en temas relacionados con la recaudación de fondos haciendo acciones para generar recursos que pudieran después ser aplicados a proyectos en el país. Y luego, en el año 2006, se incorporó otro tipo de trabajo vinculado con lo que llamamos el “relacionamiento con empresas no financiero”, donde promovemos prácticas para que estas puedan reconocer si están generando algún tipo de situación negativa hacia la infancia y la adolescencia, y que cada vez más realicen acciones que generen un efecto positivo. Por ejemplo: licencias para los cuidadores, lactancia materna, espacios de cuidado para sus empleados o la generación de contenido educativo que fomente las habilidades para la vida adulta de los adolescentes, relacionado con los ámbitos digitales y la innovación. Ahí las empresas pueden tener un rol.
– ¿Cómo reciben las empresas las iniciativas que Unicef propone?
– Desde el punto de vista de lo que hacemos en recaudación de fondos, siempre hay interés por llevar a cabo acciones que generen solidaridad, que también refuercen sus propias políticas de sustentabilidad interna. Las compañías ven con mucho valor que Unicef les proponga hacer cosas en conjunto. Y en términos de trabajar en el cambio de prácticas, vamos generando mayor entendimiento. Está el concepto de “marca empleadora”: cómo cada empresa se posiciona como un espacio de trabajo y qué tipo de beneficios les va a mostrar a sus empleados actuales y potenciales para retener, fidelizar y atraer nuevo talento. Las prácticas de cuidado también mejoran el sentido de pertenencia con la empresa, la fidelidad, el clima laboral. Más allá de hacer que los chicos tengan un mejor comienzo en la vida porque van a poder ser acompañados y cuidados por sus padres, y ellos a su vez van a poder hacerlo de una forma más integrada a su vida, está el beneficio que van a tener las propias empresas de implementar este tipo de políticas. Vemos desde nuestro rol en Unicef que hay una gran apertura y un gran campo de trabajo en acciones que generen compromiso de parte de las empresas y que permitan solventar proyectos, que es algo superimportante.
– ¿Cómo trabajan con el sector privado para recaudar los fondos que permiten llevar adelante los programas prioritarios de Unicef?
– Hay un gran abanico de cosas que hacemos con las empresas, desde aquellas que se interesan en una determinada temática y quieren apoyar un proyecto en algún lugar del país para ayudar a un determinado número de chicos, que cuentan con presupuesto para aplicar a un fin social y a las que nosotros les damos la posibilidad de hacerlo, hasta algo más amplio para promover alguna política pública para todos los chicos que viven en la Argentina o cuestiones más ligadas a lo que es el marketing con causa: campañas, acciones de tipo promocional que las empresas puedan hacer con sus marcas y asociarlas a algún fin benéfico y, de esa manera, generar recursos para Unicef. También tenemos diferentes eventos que llevamos adelante durante el año. Por ejemplo, la carrera Unicef por la Educación, que realizamos a principios de año en Palermo, en la que muchas marcas se suman; Un Sol para los Chicos, el evento televisivo asociado al mes de los niños y las niñas en la Argentina; y siempre a fin de año hacemos algún otro evento institucional donde las empresas pueden participar. En todas estas iniciativas, Unicef trata de concientizar, posicionar temas, comunicar cuestiones, pero a la vez recaudar fondos, y las empresas son una parte importante de la acción que llevamos adelante.
– Hace 32 años que organizan Un Sol para los Chicos en la Argentina de forma ininterrumpida. ¿Cómo fue el evento este año?
– Un Sol para los Chicos es un programa de televisión tipo teletón que canaliza la solidaridad de la gente, de las empresas, de la sociedad, y es algo bastante impresionante. No hay muchas iniciativas parecidas que Unicef esté llevando adelante en el mundo que hayan durado tanto tiempo. Este año se hizo el 12 de agosto, como siempre en conjunto con El Trece, que es nuestro socio estratégico, desde el predio de la Fiesta de La Flor en Escobar. Tuvimos shows de música, invitados, celebridades, y se mostraron al aire las acciones que Unicef realiza en la Argentina y en el mundo, que es una buena manera no solo de comunicarle a la sociedad lo que estamos haciendo y por qué es importante, sino también de rendir cuentas. Muchas personas y empresas colaboraron el año pasado durante todo el año, y este es un momento importante para que se vean concretamente las acciones que Unicef pudo llevar adelante con lo que se recaudó. Además, ese día mucha gente se comunica al 0810 333 4455, que es el teléfono de donaciones individuales de Unicef, y comienza a donar o refuerza su donación. Este año, además, participaron por un sorteo en el que nos apoyó la firma Naldo.
– Es destacable el tiempo que hace que se realiza este evento de manera ininterrumpida y con un gran nivel de participación.
– Sí, es bastante impresionante. Cuando lo comentás con personas que no viven acá o están trabajando en Unicef en otros países, no lo pueden creer. Es un evento importante que nos lleva mucho tiempo organizar, un motivo de orgullo y también de alegría para la gente. Hay muchas personas que donan hace veinte años todos los meses. Y se da que una vez que una empresa decide estar en Un Sol para los Chicos, lo más probable es que se mantenga en el programa durante muchísimos años. Por ejemplo, Mimo & Co. nos ayuda con las remeras que se hacen para ese día. En 2002 empezamos con ellos y la remera que vamos a tener este año es de Mimo.
– ¿Cuáles son los principales proyectos que tienen en Alianzas Corporativas para 2023 y 2024?
– Por un lado, un gran objetivo es generar siempre formas de relacionamiento, plataformas de recaudación, eventos, alianzas, acciones de marketing que renueven el compromiso de las empresas con las metas que tenemos en la Argentina. Reforzar la parte de recaudación y potenciarla al máximo en lo que podamos. Y en relación con cómo trabajamos en y con las empresas en políticas, tenemos dos grandes iniciativas. Una de ellas se llama Empresas que Cuidan, que cuenta con una web (Empresasquecuidan.org) donde está todo el material que las compañías pueden consultar, también hacer un autodiagnóstico para saber cómo están con respecto a las políticas de cuidado y acceder a una serie de recursos y de insumos para poder mejorar sus prácticas. Hay un proceso de retroalimentación y de mejora continua que está buenísimo, y lo acompañamos con momentos de capacitación y charlas que están dando muchos resultados. La otra gran iniciativa que este año vamos a estar impulsando se llama Oportunidades Únicas, y es la creación de una plataforma donde podamos concentrar todas las ofertas que las compañías hoy están llevando a los adolescentes y jóvenes relacionadas con temas de capacitación, formación para la vida adulta, desarrollo de habilidades soft y preparación para el mundo del trabajo. La idea es que Unicef sea un organismo que reúna toda esa oferta, haga una cierta curaduría y la potencie, la haga llegar a más cantidad de chicos, chicas y adolescentes, que puedan participar en proyectos de Unicef y, de esa manera, lograr que ellos, además de cursar y terminar sus estudios secundarios –algo muy importante y uno de los grandes temas en la Argentina–, cuenten con las herramientas para tener otro tipo de conocimientos que hoy las empresas les pueden hacer llegar. Ya hemos hecho algunos testeos el año pasado, capacitación y formaciones en programación, el uso de tecnología y cuestiones básicas de la cultura de los ámbitos laborales, hasta cómo preparar un currículum o ir a una entrevista de trabajo. Esos son los grandes desafíos que tenemos a futuro y queremos invitar a las empresas a que se sumen y nos acompañen.
– ¿Estas iniciativas surgieron en la Argentina o son proyectos de Unicef internacional que se aplican acá?
– Surgieron acá. La Argentina es un país que tiene mucha historia en lo que es recaudación con empresas. Muchas acciones que hemos llevado adelante para juntar fondos luego se han replicado en otros países, como Empresas que Cuidan, que comenzó en la Argentina y ahora muchos países de la región quieren armar sus capítulos locales, como México, Bolivia, Colombia, Paraguay. Y Oportunidades Únicas no lo hemos iniciado aún, va a empezar dentro de muy poco, pero la idea también es generar este tipo de plataformas para el contexto de nuestro país, pero que después puedan tener impacto más allá y que sirvan para que los chicos tengan mejores propuestas y maneras de desarrollarse.