Si tuviésemos que brindar una definición corta del término agricultura, podríamos decir que es una actividad milenaria clave para la subsistencia del ser humano en todo el mundo. También nos ayudaría saber que se tarta del sector que tan solo en Argentina, según informes de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA), genera el 24% de los puestos de trabajo, lo que significa que emplea a 3,7 millones de personas dentro del territorio nacional.
Pero estos datos solo nos brindarían un acercamiento para comprender la importancia de esta actividad que cada 9 de septiembre celebra su día a nivel mundial, una jornada que busca homenajear a aquellas personas que dedican su vida al cultivo de la tierra con la finalidad de producir alimentos de la máxima calidad para el consumo de una sociedad creciente, y que además nos invita a reflexionar acerca de los retos que debe afrontar el sector agrícola a escala global como adaptación a las necesidades medioambientales y a los nuevos hábitos de consumo.
Como respuesta a los requerimientos de cambio nace la Agricultura Regenerativa, un enfoque innovador y holístico que busca restaurar para crecer. En este sentido, cada vez son más las compañías que lo adoptan e impulsan, apostando así por un desarrollo consciente a partir de prácticas que ubican al medioambiente en el centro, entendiendo que su salud es imperiosa para el desarrollo adecuado de la actividad.
Para conocer cuáles son las prácticas concretas y resultados al momento, así como los objetivos y la profundización de este paradigma, conoceremos las experiencias de dos compañías líderes como son PepsiCo y Grupo Arcor, que adoptaron la agricultura regenerativa y buscan continuar trabajando en este camino. También conoceremos a los Doctores de los Suelos, la iniciativa de FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) que tuvo su desembarco reciente en la Argentina.
“La aplicación de este enfoque es crucial, casi que diría inevitable, y en los últimos años ha crecido exponencialmente en el país debido a sus múltiples beneficios, que no solo impactan en el medioambiente, sino que también responden a la creciente demanda de los consumidores por alimentos producidos de manera sostenible” explica Guillermo Cascardo, Gerente de Agronegocios para PepsiCo Argentina.
¿Por qué es importante la transición hacia un modelo de agricultura regenerativo?
Porque se centra en restaurar y mejorar la salud del suelo, incrementando la biodiversidad y reduciendo las emisiones de carbono, factores clave para enfrentar los desafíos del cambio climático. A diferencia de los métodos tradicionales, la agricultura regenerativa no solo busca mantener, sino también regenerar los ecosistemas agrícolas, dándoles mayor resiliencia frente a los cambios climáticos. Esto se logra mediante prácticas como la eficiencia en el uso del agua, la medición y reducción de emisiones de CO2, y el uso de tecnología avanzada.
En el contexto de la producción de ingredientes para snacks, la adopción de prácticas regenerativas contribuye directamente a una mayor calidad y sostenibilidad de los productos. Al mejorar la salud del suelo, se logra una producción más eficiente que requiere menos insumos, lo que refuerza la resiliencia de los sistemas productivos y resulta en productos más naturales y saludables para los consumidores.
¿Cuáles son las principales prácticas que implementan para impulsar el modelo?
Ofrecemos a nuestros productores entrenamiento especializado y acceso a tecnologías de campo avanzadas como drones, imágenes satelitales, y sistemas de monitoreo, integrando prácticas de agricultura de precisión. Además, promovemos el uso de productos biológicos y cultivos de cobertura para mejorar la salud del suelo y la sostenibilidad de las cosechas. Los agricultores proveedores de papa en Argentina, nuestros socios comerciales, son los únicos en el mundo PepsiCo que están 100% certificados con normas Global-GAP de buenas prácticas agrícolas. Estas certificaciones aseguran la inocuidad del producto y reflejan su trazabilidad, el cuidado del medioambiente y de la salud, la seguridad y el bienestar de los trabajadores.
Asimismo, nuestros productores también están certificados por la norma SFP (Sustainable Farming Program), una norma propia de PepsiCo que incluye pruebas adicionales sobre el cuidado del medioambiente y la mejora de las condiciones de los trabajadores del campo. La integración de tecnologías avanzadas, como sensores de humedad del suelo y drones para el monitoreo de cultivos, ha permitido a los agricultores gestionar sus recursos de manera más eficiente. Esto incluye la optimización del riego y la fertilización, reduciendo el uso de agua y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Además, las plataformas digitales proporcionan datos en tiempo real, ayudando a los agricultores a tomar decisiones informadas que benefician tanto al medioambiente como a la producción. Estas prácticas no solo fortalecen sus negocios, sino que también aseguran una cadena de suministro más resiliente y sostenible.
¿Cuáles son los resultados al momento?
Los resultados son muy positivos y reflejan nuestro compromiso con la excelencia operativa y la productividad. Todo el proceso de cultivo, cosecha y post cosecha está cuidadosamente monitoreado para garantizar que obtengamos el mejor producto posible, cumpliendo con nuestros altos estándares de calidad y sostenibilidad.
En 2023, más del 50% de los productores de papa de PepsiCo en Argentina implementaron al menos dos prácticas de agricultura regenerativa (como la reducción del uso de agua y la utilización de fertilizantes con baja huella de carbono). Específicamente, alcanzamos un 56% de adopción de estas prácticas el año pasado y nuestro objetivo es aumentar este porcentaje al 68% para finales de 2024.
Gracias a estas iniciativas, desde 2015 hemos logrado mejorar la eficiencia en el uso del agua en un 22% y reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero en más del 20%. Estos logros no solo validan la efectividad de nuestras estrategias actuales, sino que también refuerzan nuestro compromiso de seguir impulsando mejoras continuas en materia de agricultura regenerativa.
“En el marco de nuestra estrategia de Sustentabilidad 2030 Vivir Mejor asumimos nuestro compromiso con la agricultura regenerativa que nos convoca a adoptar modelos conservacionistas para la producción de nuestras materias primas, que contribuyan con la regeneración de los ecosistemas intensificando las mejores prácticas agrícolas e incorporando tecnologías de precisión” asegura Bárbara Bradford, Gerente Corporativa de Sustentabilidad en Grupo Arcor.
¿Por qué es importante la transición hacia un modelo de agricultura regenerativo?
En Grupo Arcor creemos firmemente que los sistemas de producción de alimentos deben ser sostenibles para satisfacer la demanda de una población mundial creciente. Sabemos que tenemos el desafío como humanidad de revertir el cambio climático y sus impactos. La transición hacia un modelo de agricultura regenerativa es una solución prometedora para revertir este fenómeno, porque promueve prácticas agrícolas que restauran y mejoran la salud del suelo, la biodiversidad y los ecosistemas. Y fundamentalmente porque permiten la fijación de carbono en los suelos agrícolas.
¿Cuáles son las prácticas principales que implementan para impulsar el modelo?
En Grupo Arcor trabajamos para incorporar la agricultura regenerativa a la producción de las principales materias primas agrícolas que usamos para la elaboración de nuestros productos.
Desde el año 2012 impulsamos nuestro programa Agro Sustentable, orientado a promover la productividad, el cuidado ambiental y el cuidado de las personas en la producción. Para lograr estos objetivos trabajamos junto con los productores agrícolas que forman parte de nuestra cadena de valor e implementamos iniciativas de mejora continua en la producción a través de la capacitación, tecnificación, asistencia técnica y financiamiento. Desde entonces, impulsamos el Programa de Producción Sustentable de Azúcar, el Programa de Desarrollo de Productores de Maíz y Trigo Sustentables, el Programa de Desarrollo de Productores Frutihortícolas, y el Programa de Producción Forestal Sustentable.
En cada una de estas cadenas, trabajamos en base a los más altos estándares de producción agrícola sustentable, como BONSUCRO para azúcar, SAI-FSA para maíz y trigo, o Global GAP para frutas y hortalizas. En 2023, produjimos +16.000 toneladas de azúcar con certificación BONSUCRO y +4.000 toneladas de azúcar orgánico. También trabajamos junto con 13 productores para certificar +280.000 hectáreas de producción de maíz y trigo. Y logramos recertificar +275 hectáreas de producción propia de ciruela, durazno, naranja, membrillo y damasco bajo Global GAP.
Con el propósito de profundizar estas iniciativas desde un enfoque regenerativo, en 2022 lanzamos el Programa Agro+30, para promover modelos de producción regenerativos, que aseguren la resiliencia de los ecosistemas y la estabilidad climática, el desarrollo de las comunidades productoras y una interacción positiva entre los sistemas productivos y los ambientes naturales. Con este objetivo, el programa se propone profundizar la adopción de prácticas regenerativas por medio de tres ejes de trabajo: el balance de carbono, las biosoluciones y agricultura digital.
Para avanzar en el primero de los ejes, en 2023 lanzamos el proyecto “Carbono en Suelos Agrícolas” junto con CREA y UPL, a través del cual nos proponemos establecer líneas de base de carbono orgánico en suelo en 9 producciones de 4 regiones productivas de Argentina para luego definir estrategias que incrementen la fijación de carbono en los suelos agrícolas. En el segundo eje, el último año avanzamos en el desarrollo de ensayos agrícolas con biosoluciones en la producción de tomate en la provincia de San Juan. Finalmente, en el eje de agricultura, en 2023 avanzamos junto con la start up Kilimo, en la medición de la huella de agua en la producción de tomate. El objetivo de este trabajo fue hacer un relevamiento y plan de mejora en la huella hídrica en productores de tomate, en una región de altísimo stress hídrico.
Estamos convencidos de que cada uno de estos abordajes nos permitirá avanzar hacia una producción que sea cada vez más favorable a la naturaleza.
Los Doctores de los Suelos ahora en Argentina
Con el objetivo de brindar una herramienta completa de experiencias y aprendizaje, la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid)-bajo la coordinación del Instituto Aaprender– y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), pusieron en marcha en Argentina el Programa Global de Doctores de los Suelos, una iniciativa promovida por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) y la Alianza Mundial por el Suelo (AMS).
Se trata de una plataforma de formación de agricultor a agricultor, con el fin de desarrollar la capacidad de los agricultores en materia de manejo sostenible del suelo y al mismo tiempo, apoyar a los gobiernos nacionales y a las partes interesadas a abordar las necesidades de sus comunidades rurales.
La herramienta ofrece apoyo a agricultores, responsables de políticas, planificadores del desarrollo, agentes de extensión, ONG, sector privado y otros profesionales o parte interesada en transmitir la importancia del suelo como recurso vital.
