Antigal Winery recibió la certificación de bodega sustentable, otorgada por Bodegas de Argentina.
En Argentina, la toma de conciencia hacia una producción más sustentable en la vitivinicultura comienza aproximadamente a principios de 2010 con un estudio que encaran Bodegas de Argentina, INTA -Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria-, INV -Instituto Nacional de Vitivinicultura- y la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNCuyo, para la redacción de un protocolo de autoevaluación de sustentabilidad que se fue perfeccionando a medida que se avanzaba en el estudio y práctica del tema.
Este protocolo es de alcance nacional, no está limitado sólo a los socios de Bodegas de Argentina y tiene un enfoque integral que cubre todos los aspectos referidos a la sustentabilidad ambiental, social y económica de la vitivinicultura.
Antigal Winery hace varios años que trabaja en el tema. Una vez realizadas las tareas que se creyeron necesarias, se trabajó con la certificadora Letis y se llevó adelante una auditoría. En base a los consejos de esta empresa se hicieron las modificaciones necesarias y se intensificaron las tareas en las que se había acertado.
Hoy la compañía mejoró los catorce capítulos del protocolo concretado hace más de diez años y de acá a 2025, cuando la consultora realizará una nueva auditoría, la bodega deberá demostrar los avances conseguidos y cómo se posiciona en mejoras de sustentabilidad.
«Estamos orgullosos y agradecidos por la certificación recibida. Venimos trabajando año a año para mejorar las prácticas y formas de trabajo con el objetivo de proteger nuestro entorno y a la comunidad a la que pertenecemos. El cuidado del medioambiente es fundamental en todo proceso de realización de nuestros vinos. Tenemos un largo camino por delante para seguir mejorando y el equipo está comprometido con esta visión a largo plazo», dijo Alessandra Cartoni, CEO de Antigal Winery.