Banco Galicia, en articulación con Eco House y el Proyecto Bayka, plantaron más de dos mil árboles de especies nativas en la Reserva San Sebastián en la provincia de Misiones. El trabajo fue desarrollado por representantes de las organizaciones sociales y colaboradores de la entidad financiera.
Este proyecto, que da nacimiento al Bosque Galicia, tiene como objetivo restaurar el ecosistema de la Selva Misionera y compensar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que emite la institución financiera por su actividad. Así, gracias a los ejemplares plantados se compensaron 7.700 toneladas de carbono contabilizadas durante el año 2021.
La Reserva San Sebastián está ubicada estratégicamente en el corazón del Corredor Biológico, entre los parques provinciales Urugua-í y Foersters, en el Municipio de Comandante Andresito, al norte de la provincia de Misiones, y en medio de la Selva Atlántica. La misma se encuentra en alerta por la constante pérdida de ambientes, la disminución de la biodiversidad y la extinción masiva de especies.
“Frente a la urgencia del calentamiento global, desde Banco Galicia estamos convencidos de que es momento de pasar de la conversación a la acción. Esta alianza que tenemos junto a las organizaciones sociales nos garantiza la sustentabilidad en el tiempo del proyecto”, dice Constanza Gorleri, Gerente de Sustentabilidad Banco Galicia.
Además, se implementará la campaña #RestaurAccion con el objetivo de aportar soluciones para la desaceleración del cambio climático. Y se trabajará en educación ambiental como herramienta fundamental para la transición hacia un mundo más justo, inclusivo y sostenible, que permitirá trabajar el proyecto de restauración ecológica de manera colaborativa, comunitaria e integral.
En noviembre del año pasado, la entidad financiera se convirtió en una empresa carbono neutra, lo que implica alcanzar un resultado neto de cero emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), es decir, la captura de aquellos gases que no se pudieron evitar y se emitieron a la atmósfera.
Además, Banco Galicia se adhirió a PCAF (Partnership for Carbon Accounting Financials). La herramienta permitirá medir las emisiones provenientes de la cartera del negocio como un primer paso para fijar objetivos de mitigación de esta huella y diseñar soluciones financieras con foco en la transición hacia una economía baja en carbono.
“La neutralidad de la huella de carbono operacional y la fijación de metas basadas en ciencia para la mitigación de emisiones, forman parte de la transición del Galicia hacia una operación y una cartera baja en carbono y acompañan el objetivo global de alcanzar las cero emisiones netas al 2050 para que la temperatura media global no supere el 1,5°C de aumento”, concluyó Gorleri.