Hace más de 25 años, en el asentamiento más poblado de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires de la Villa 21-24-Zavaleta, se encuentra la “Casa Cambalache”, iniciativa que llevan adelante un grupo voluntario de vecinos y vecinas, a través del cual reciben y preparan alimentos para más de 300 personas por día, además brindan apoyo escolar y actividades culturales. En este año con la pandemia del Covid-19, llegó a dar alimento a más de 400 personas.
Casa Cambalache es mucho más que un comedor, es el oído y el consejo para las múltiples problemáticas de los vecinos y vecinas, como la falta de urbanización, la violencia de género y la falta de alimentación saludable.
De esta manera, “Proyecto Cambalache” es una iniciativa de la ONG Bitcoin Argentina que busca promover acciones positivas de la comunidad, por medio de reconocimientos e incentivos al trabajo voluntario de quienes participan en el comedor. Esto se realiza aplicando tecnología Blockchain, permitiendo que las horas de voluntariado se conviertan en puntos y con ello, las personas voluntarias puedan luego comprar insumos necesarios en los comercios adheridos. La idea de utilizar la tecnología es aportar transparencia y trazabilidad al proceso, dando certeza al donante del destino de los fondos aportados.
“Gracias al proyecto pudimos tener un beneficio económico que nos permite canjear los puntos por productos – de limpieza – (que es lo que más necesitamos) pero lo más importante es que nos vimos beneficiadas porque aprendimos diferentes usos de un teléfono, conocimos lo que es una app y cómo usarla, qué es un QR y a escanearlo. Dice Claudia una de las mujeres voluntarias del comedor Casa Cambalache.
Si me hubieran preguntado hace un tiempo si yo podría hacer algo de todo esto, hubiera dicho `imposible, yo de esto no entiendo nada’. Hoy nos enorgullece poder ser parte de un proyecto que incluye tecnología.” Comenta Noemí una de las voluntarias del comedor.
¿Cómo funciona?
Se trata de una iniciativa que busca contribuir a una microeconomía sustentable:
Las donaciones recibidas tienen un triple impacto. Las personas voluntarias del comedor reciben en forma de puntos, el valor de la donación después de escanear un QR con su celular, que luego pueden usar para cambiar en los distintos almacenes del barrio adheridos al proyecto. De esta forma, la gente que asiste al comedor sigue teniendo un plato de comida, las personas voluntarias siguen yendo a colaborar y los negocios del barrio siguen creciendo.
Se destaca por ser 100% transparente
Un informe permite a los beneficiarios y/o donantes auditar cada punto entregado y recibido, e identificar así, esos movimientos en la blockchain, pudiendo ver exactamente qué actividades y a quién apoyó con su aporte.
Promete una gestión eficiente
El 100% de lo donado termina en manos de los beneficiarios en forma de puntos canjeables en comercios, gracias a que el proyecto requiere un mínimo costo de setup y mantenimiento, que se cubre mediante un descuento hecho al comerciante.
Las etapas del proyecto
Tras una exitosa primera etapa que terminó y apoyó a más de 10 personas voluntarias durante varios meses, se inicia este año una segunda etapa que cuenta con el apoyo de empresas como Newsan, Prime XBT y Accenture, y de personas individuales con el objetivo de llegar a muchos más comedores del barrio.
“El contexto actual aceleró la transformación digital y, con la cultura emprendedora que nos caracteriza, promovemos la digitalización de proyectos con impacto. En este caso, desde Newsan nos sumamos a Proyecto Cambalache con el aporte de celulares como herramienta para la inclusión, permitiendo que cada vez más mujeres puedan ser parte de este innovador proyecto”. Comenta Marcela Cominelli, Gerenta de Relaciones Institucionales de Newsan.
Pero esta nueva etapa espera llegar a más comedores por lo que representa un mayor desafío de gestión y padrinazgo.
“Estamos confiados en que lo lograremos y ya estamos en conversaciones con algunos actores dispuestos a aportar parte del capital que va a las personas voluntarias, pero es un camino largo”, comenta Javier Cerra, de la ONG Bitcoin Argentina.
“Gracias a la donación de celulares de Newsan y al apoyo de Accenture y donaciones monetarias como las de PrimeXBT, estamos convencidos de que este proyecto tomará nuevas dimensiones y podrá ser un ejemplo a seguir en otros ámbitos y barrios”completa Jimena Vallone, responsable de RRII de la misma ONG.
Esperamos que el proyecto se conozca y lograr con ello el apoyo de quienes quieran colaborar a través de donaciones que permitan conseguir los objetivos propuestos y de esta manera, ayudar a la visibilización del trabajo de personas voluntarias en barrios emergentes. www.proyectocambalache.org.