Las ONG con foco en el medio ambiente, como Fundación Vida Silvestre, trabajan en conjunto con compañías, gobiernos, otras ONG, comunidades y otros actores, para transformar los mercados y lograr la preservación de los recursos naturales. El compromiso continuo a largo plazo con las empresas, el sector financiero y los gobiernos, está propiciando un entorno para la sostenibilidad, abordando los mercados, las finanzas y las políticas públicas de forma integrada.
“El mayor nivel de concientización se ve reflejado en nichos de mercado que prefieren productos que cumplan con criterios de sustentabilidad ambiental. Esos consumidores quieren saber cuán verde son los productos que se autodenominan verdes, y esta respuesta puede ser brindada por certificaciones de sustentabilidad que surgen de procesos multi-stakeholder, que incluyen organizaciones de la sociedad civil, (como WWF y Fundación Vida Silvestre Argentina), productores, retailers y bancos, entre otros. Existe una serie de certificaciones de sustentabilidad ambiental para varios de los commodities considerados críticos”, explicó Pablo Cortinez, Focal Point de finanzas sustentables de Fundación Vida Silvestre para WWF.
Una de las primeras certificaciones, y probablemente la que goza de mayor reconocimiento, es el Forest Stewardship Council (FSC), orientada a productos de origen forestal. Análogamente, para los productos de origen pesquero existe la Marine Stewardship Council (MSC), en tanto la Round Table on Responsible Soy (RTRS) se ocupa de la soja. Para el caso de la carne vacuna, la GRSB (Global Round Table for Sustainable Beef) se encuentra en proceso de negociación y, a su vez, Vida Silvestre está trabajando en la Mesa Argentina de Carne Sustentable.
En este contexto y considerando la Agenda 2030 y el Acuerdo de París, se ha dado lugar a nuevos compromisos, reforzados por parte de los gobiernos y empresas para conservar y apoyar la producción sostenible de commodities.
El compromiso con las empresas está contribuyendo a impulsar la acción colectiva en áreas como cadenas de valor libres de deforestación y nuevos enfoques para fomentar la producción sustentable de commodities en las regiones más vulnerables. De las 100 mejores empresas del mundo, 78 son miembros o participan en mesas redondas de múltiples partes interesadas, y 62 participan en otras plataformas de sostenibilidad como Global Forest & Trade Network (GFTN) y Consumer Goods Forum.
Esto se complementa con los compromisos de sustentabilidad que empresas de alcance global como Ikea, Home Depot, y Mc Donald’s, entre otras, vienen realizando desde hace años.
En 2017, Fundación Vida Silvestre y BID Invest llevaron a cabo la Segunda Encuesta sobre Sustentabilidad en Bancos de Argentina que incluyó bancos locales privados, extranjeros y bancos públicos. Consultados en particular acerca de las certificaciones de sustentabilidad, las entidades financieras mostraron un mayor nivel de conocimiento respecto de la primera encuesta, realizada en 2014. “Muchas veces, cuando hablamos con los bancos sobre la apertura de líneas verdes, nos consultan sobre cómo ellos, sin ser especialistas en el tema, pueden estar seguros de que los clientes que se presentan como “verdes” realmente producen de manera sustentable”. En ese caso, ciertas certificaciones de sustentabilidad podrían actuar como un sello de calidad.
Economista con vasta experiencia en riesgo y en el mercado de capitales, Cortínez manifestó que los bancos, al incorporar a su análisis criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG por su siglas en inglés), acotan su riesgo tanto en cuanto al valor del colateral de sus clientes, como con relación al flujo de fondos proyectado. Con relación a esto último, expresó que “existen importadores en algunos países que, de manera creciente, requieren ciertas certificaciones como reaseguro de que los productos han sido producidos de manera sustentable y que no existen dudas acerca de su trazabilidad. Esto hace que estos criterios sean críticos para ingresar en ciertos mercados, o bien para permanecer en ellos”.
De esta manera, Fundación Vida Silvestre Argentina, junto a WWF, continúa trabajando en el sector, aportando datos e iniciativas para debatir e informar sobre la temática, contribuyendo para que las finanzas sustentables actúen como un acelerador de buenas prácticas ambientales en los diversos sectores productivos.