Pablo Bruera se enorgullece de los objetivos que fue cumpliendo como intendente de La Plata, pero sabe que queda mucho por hacer y tiene una meta clara: “Que sea la mejor ciudad de la Argentina”.
Pablo Bruera recuerda sus inicios en la política con los debates en el ámbito universitario, en el contexto de apertura democrática de 1983. “Se generó ese espacio de libertad, de promoción, de ganas de mirar, leer y escuchar a los grandes líderes de los distintos partidos políticos y verse reflejado en ellos, frente a lo que había sido la dictadura. Teníamos cierta admiración por esas personas que trabajaron mucho”, cuenta el intendente de la ciudad de La Plata, sentado en un sillón de su despacho en la capital de la provincia de Buenos Aires.
El centro de estudiantes y la militancia lo fueron entusiasmando. “Generamos una agrupación política y nos vimos reflejados en el peronismo”, resume Bruera, que primero fue concejal y en 2007 ganó la elección para intendente, cargo en el que fue reelecto en 2011. “Le dimos un perfil a la ciudad que nos parece bastante interesante, sabiendo que La Plata tiene un potencial enorme”, dice.
Bruera es abogado, nació el 1° de octubre de 1964, disfruta del cine y del teatro. Además, claro, le gusta el fútbol, sobre todo estando en una ciudad tan apasionada por el deporte más popular del mundo. “Acá hay exigencia para que seas de Gimnasia o de Estudiantes, pero soy hincha de Boca, se dio así”, comenta con una sonrisa.
Está casado con Susana, con quien tiene tres hijos: Justina, de 18 años, que sigue los pasos del padre y estudia Abogacía; Facundo (16), que juega al fútbol en la séptima de Estudiantes y va al colegio; y Camila (11), que también va al colegio y a quien le gusta bailar y la música. “Lo que hago es apoyarlos en lo que decidan”, dice.
¿Cómo está en relación a los sueños de los inicios de su carrera política y los que pudo cumplir?
Bueno, creo que ha habido avances importantes que ha generado la democracia. La libertad, la posibilidad de disentir, el desarrollo que tiene la Argentina en sus políticas de derechos humanos, algo que es un orgullo a nivel internacional. También hay cosas pendientes, que nos quedan y que son los sueños que vienen. Pero me parece que el país ha hecho un camino muy interesante, que tiene que ver con la inclusión, con más gente adentro de los sectores productivos.
¿Cuáles son las metas a futuro?
Que La Plata siga creciendo, que pueda tener nuevas oportunidades, que la gente se sienta orgullosa, que podamos cumplir el sueño de los platenses, que es ni más ni menos que el hecho de que sus hijos puedan vivir en paz, tranquilos, en libertad, con trabajo, con estudio… Las cosas simples, en una de las ciudades más importantes de nuestro país. Mi sueño es que La Plata sea la mejor ciudad de la Argentina. Y a nivel personal se verá, me queda casi un año de gestión para poder concretar tres o cuatro ejes nuevos.
¿Cuáles son?
Por ejemplo, la policía comunal, que nos está llevando muchísimo trabajo. Es una herramienta y una institución nueva. Estamos con 800 personas estudiando en una escuela nueva, con una política de seguridad para esta ciudad. Ahí hay un trabajo enorme.
¿Cómo está hoy la ciudad de La Plata?
Está creciendo, buscando nuevos nichos. Por ejemplo, el tema del turismo para nosotros es realmente muy importante. Se están construyendo cinco hoteles, tres de cinco estrellas. La ciudad se está enfocando en el turismo, con una política agresiva en lo que tiene que ver con congresos, convenciones y seminarios, a través de las universidades, los colegios y las cajas profesionales. Ofrecemos la ciudad como una alternativa en ferias internacionales. Todo eso ha generado unos 80 congresos internacionales al año y otros 200 a nivel nacional. Con lo cual, prácticamente tenemos todas las semanas un evento que convoca entre 500 y 1000 personas. Ese movimiento ha generado un volumen permanente de gente que viene a visitar la ciudad y se vincula con los sectores históricos. A su vez, ha promovido el desarrollo de inversiones privadas. A fin de año inauguramos el primer centro de convenciones internacionales que va a tener La Plata, con cocheras subterráneas. Además de todo esto, se siguen promocionando los monumentos históricos, como la catedral, la República de los Niños, los palacios, el museo. Se armó un planetario nuevo con una destacada tecnología. Ha generado trabajo y un desarrollo a futuro con los sectores público y privado.
¿Qué le dejan a La Plata experiencias como ser sede de la Copa América en 2011?
Esas experiencias son extraordinarias porque nos permiten posicionarla en el mundo. Casi en forma gratuita podemos hacer conocer la ciudad en el planeta cuando acá juegan la selección de fútbol, Los Pumas, los All Blacks, o con los recitales internacionales. Es toda una puesta en escena que tiene La Plata que va dejando un trabajo fuerte que aprovechamos para lo que viene. El Estadio Único nos sirvió como vidriera para capitalizar un montón de otras cosas que son muy útiles.
¿Cuáles son los principales planes para mejorar la ciudad?
El plan hidráulico para mitigar futuras posibilidades de una catástrofe como la que tuvimos el año pasado. El saneamiento del arroyo del Gato, que son 836 millones de pesos de inversión. Después tenemos canales aliviadores nuevos por avenidas centrales, más todo lo relacionado con otros arroyos que tiene la ciudad de La Plata. Estamos trabajando de acuerdo a las nuevas realidades climáticas que vive la Argentina. Esto tiene un aval a nivel nacional, provincial y municipal, con un estudio técnico que hizo la universidad. Es un plan estratégico que venimos desarrollando hace dos años, aproximadamente. En algunos casos, lleva una ejecución del 40% o 50%, en algunos casos un poco más, en otros un poco menos. En muy importante para la ciudad porque es el primer plan hidráulico así, general y estratégico, para actualizarla a las nuevas condiciones climáticas.
¿Qué otros aspectos están entre los objetivos centrales de su gestión?
Generarle un perfil productivo, que no lo tenía, porque esta es una ciudad universitaria y administrativa. Lo que hacemos es buscar nuevos perfiles para generar inversiones y empleo. En ese sentido, está el turismo, los parques industriales… Todo lo que tiene que ver con productos nuevos.
¿Por ejemplo?
Estamos promoviendo la cerveza artesanal platense. Tenemos alrededor de 90 productores a los que apoyamos. La Plata produce la mayor cantidad de alcauciles de la Argentina. Hicimos un vínculo para poder exportarlos a Italia. Bolonia es la ciudad italiana que tiene mayor volumen de alcaucil y trabajamos contra estación, cuando no hay allá, nosotros enviamos. Cambiamos su semilla para exportar uno que sea como el que consume el europeo, que es de color blanco. En La Plata se produce el 97% de todo el alcaucil de la provincia de Buenos Aires y el 75% de todo el país. Somos los especialistas.
¿Se trabaja en investigación?
Sí, estamos muy relacionados con la universidad, para darle nuevas oportunidades a la ciudad. Tenemos un centro de investigación de la flor, porque La Plata es la principal productora de flor del país, aspecto en el que superamos a Escobar. Desarrollamos eventos que muestran la producción local. Buscamos un vínculo para ver cómo el Estado los puede ayudar. Por ejemplo, generamos ordenanzas de protección y promoción. Todo esto nos ha dado mucho resultado.
¿Cómo es el vínculo con las empresas?
Nosotros tenemos dos parques industriales. Uno está totalmente vendido. En el otro nos quedan solo diez terrenos, con lo cual está prácticamente colmado. La idea es vincular todo lo que produce La Plata con estos parques: flores, frutas, verduras… Tiene una industria que ahora estará vinculada con el puerto, que se acaba de inaugurar. Es un puerto alternativo al de la ciudad de Buenos Aires, que está colapsado. Ahí hay un punto de desarrollo futuro muy importante para la región, y además se empezaron a instalar industrias relacionadas con el aeropuerto. Estamos estimulando de forma permanente la inclusión de más industrias en los parques, que tienen una ventaja impositiva importante. Ahí hay un fuerte trabajo para que estas sigan viniendo acá.
¿Cómo trabaja La Plata en temas de responsabilidad social?
El municipio genera un espacio para contener y promocionar un montón de actividades que vienen desarrollando organizaciones no gubernamentales (ONG), con las que tenemos un contacto muy fuerte. Fundamentalmente con muchas que trabajan en prevención en salud. Hace poco, por ejemplo, trabajamos en la prevención de cáncer de mama, y también intervinieron los clubes, Estudiantes y Gimnasia, y figuras como [el entrenador] Pedro Troglio y [el exfutbolista] Juan Sebastián Verón. Promocionamos una maratón y se trajo un mamógrafo para hacer controles. También apuntamos a otros temas como la diabetes, la esquizofrenia… Nos sirve mucho de contacto para hacer como docencia. A su vez, apoyamos mucho las actividades de los clubes, para generar una contención de todos los chicos. Hacemos trabajos que nos permiten contar con un espacio y programas comunes. Después, en lo que tiene que ver concretamente con acompañar y subvencionar económicamente a un montón de instituciones que tiene la ciudad, como el Hospital de Niños, donde generamos conciertos, acercamos comida y buscamos resolver cuestiones económicas y de infraestructura. En fin, estamos en contacto directo con nuestra comunidad porque entendemos que la ciudad no la hace solamente el municipio, sino un montón de gente que tiene conciencia; y esa gente es la que colabora, ayuda, y estamos en un ida y vuelta permanente.
La ciudad tiene planes de reciclaje, ¿no?
Sí, nuestro plan de reciclaje lo tenemos hace unos seis años. Lo elaboró la Universidad Nacional de La Plata, con la participación de 17 facultades. En este momento la ciudad está reciclando 150.000 kilos diarios de residuos. Es un avance bastante importante que hemos hecho. Separamos residuos en origen y los llevamos, en unas bolsas verdes, a una cooperativa de trabajo, donde se hace la separación de cada uno de los elementos, o sea el cartón, el vidrio, el metal, el plástico. Eso se vende o se generan productos importantes. Se está trabajando con un montón de cosas: se fabrican tejas con el tetra, paredes… Ahora te voy a mostrar algo.
Bruera se entusiasma y le pide a un colaborador que le acerque unos pedazos de madera que están en su despacho. Luego, explica: “Esta es una madera sintética que estamos haciendo con productos reciclados. Reciclamos 150 toneladas mensuales con una máquina que está en el Parque Industrial I. Nosotros acá tenemos un cordón verde productivo muy fuerte y se trabaja mucho en invernaderos. Todo el nylon que antes se tiraba, ahora lo estamos recuperando y se utiliza”.
El intendente de La Plata cuenta que se le paga al productor por la materia prima –el nylon– que se lleva. “Lo que hacemos –dice– es reciclarlo para hacer una madera que es muy buena: es sintética, resiste mucho en el exterior, tiene un mantenimiento muy bajo, no hay que barnizarla todos los años y, además, evitamos la tala de árboles, algo fundamental. Tiene una ventaja competitiva muy importante. En general, los decks que se ven en las piletas y en los quinchos están hechos con este tipo de madera. Ahí hay un trabajo muy fuerte a través de la Agencia de Medioambiente que tiene el municipio de La Plata. Vamos a duplicar la cantidad de madera sintética que estamos haciendo con el reciclado y tenemos un proyecto para exportar. Creo que es el único producto de este tipo en la Argentina”.