La confianza en las instituciones de seguridad pública es una condición clave para que los ciudadanos de América Latina sientan que su ciudad está dando pasos reales para ser más segura. Sin embargo, para nadie es un secreto que las instituciones de seguridad pública en muchas ciudades y países de la región no generan la confianza necesaria. Las nuevas tecnologías disponibles pueden brindar un apoyo considerable para combatir los problemas de seguridad y cambiar la percepción pública.
La organización Transparencia Internacional (TI) subraya en su último informe que 21 de los 30 países encuestados en América Latina y el Caribe tienen una percepción de transparencia inferior a 50%. Y el Latinobarómetro de 2018 provee un diagnóstico igualmente preocupante en lo referido a confianza en sus instituciones policiales. Esto hace un llamado de emergencia al aporte que la tecnología puede brindar con mecanismos de transparencia que, además de proteger a nuestros policías en la difícil tarea de combatir al crimen, a su vez ayuden a recuperar la confianza institucional y fortalezcan las tareas de seguridad ciudadana.
La tecnología y los sistemas de información y comunicación (TICs) son aliados vitales en la lucha contra el crimen y también pueden ayudar a los policías a hacer mejor su trabajo. La prioridad, según expertos, radica en “poner la tecnología al servicio de la búsqueda de evidencia para la toma de decisiones confiables.”
Con esto en mente, no sólo hablamos de datos confiables, sino de su gestión misma, su análisis inteligente para la anticipación del delito y su uso para fines de administración de justicia, cadena de custodia y acceso a la información por parte de la ciudadanía en su sentido más amplio.
La información de seguridad que se genera y se procesa en las fuerzas de seguridad pública, es sensible y debe ser cuidada con efectivos protocolos de seguridad para preservar su integridad, destino y buen manejo, no sólo por imperativos institucionales, sino por el resguardo de la seguridad de las víctimas, testigos y el público en general. Por ello, los sistemas y dispositivos que se utilicen, deben de operar bajo esta misma premisa de inviolabilidad de la evidencia capturada.
A nivel de innovación, existen múltiples tecnologías que ayudan al manejo de evidencia policial, entre ellas: drones para patrullaje, software predictivo, sistemas de video seguridad y autoaprendizaje, reconocimiento por apariencia, inteligencia artificial para centros de comando y wearables de seguridad pública como cámaras al cuerpo (bodycam) o gafas o lentes inteligentes, por mencionar sólo algunas de ellas.
En cuanto a las soluciones de cámaras al cuerpo, de acuerdo con la experiencia de Motorola Solutions, se están convirtiendo rápidamente en una herramienta predominante para la captura de evidencia digital, pues protegen a los oficiales y a los ciudadanos. Brindan múltiples beneficios al ser ergonómicas y permitir a los oficiales moverse libremente, tener comunicaciones seguras vía radio con una cámara de video y micrófonos integrados en un único dispositivo, así como acceso a consultas gracias a un software especializado que a su vez conecta con el Centro de Comando y Control, para solicitar apoyo. Así, el contenido (voz, datos, imágenes o video) de un caso determinado es registrado por el Centro de Comando y Control mientras vigilan que todo ocurra con transparencia y responsabilidad.
Gracias a la documentación de eventos en tiempo real, las cámaras al cuerpo mejoran los niveles de servicio y generan confianza en la comunidad al contar con otro “par de ojos” que cuidan que la ley se cumpla. Al mismo tiempo, permiten una mejor capacitación policial y compartir mejores prácticas.
Los resultados que ya se han conseguido en el uso de este tipo de soluciones confirman los beneficios indicados: Por ejemplo, en un importante foro de investigación para líderes policiales en E.U.A. los departamentos policiales confirmaron que ya se están beneficiando de sistemas de cámaras al cuerpo, reduciendo significativamente los costos de litigios. El 80% de los oficiales dijeron que les permite mejorar la calidad de la evidencia, casi el 90% de los departamentos notó una caída en el número de las denuncias presentadas contra la policía y más del 70 por ciento de los ciudadanos dijeron que las cámaras eran beneficiosas durante sus encuentros con los oficiales.
Motorola Solutions cuenta con soluciones de manejo de evidencia que fortalecen el accionar policial, brindando visibilidad de las situaciones de principio a fin, protegiendo la evidencia, simplificando procesos, y facilitando la colaboración inter-institucional, todo dentro de un modelo de dispositivos integrados con servicios que facilitan su gestión y la administración de gastos.
En resumen, las nuevas tecnologías y en especial las orientadas al manejo de evidencia, pueden constituirse en un elemento valiosísimo para reconstituir la confianza del público en las instituciones de seguridad pública, permitiendo hacer su operación más segura, confiable y transparente para la construcción de ciudades más seguras.