Desafíos y oportunidades de alinear la gestión empresarial a los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
El pasado 10 y 11 de mayo se llevó a cabo en el auditorio de AMIA una nueva edición de la Jornada “RSE: Tendencias e Integración de la Cadena de Valor”, organizada por Valor RSE+Competitividad en alianza con el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales de Presidencia de la Nación.
Con la presencia de invitados nacionales e internacionales, la actividad hizo foco sobre las últimas tendencias y los desafíos para la gestión sustentable de las empresas en el marco de la hoja de ruta propuesta por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) aprobados en Naciones Unidas en 2015.
Ralph Thomas Saieg, vicepresidente de AMIA, y Laila Brandy, Directora Nacional de Abordaje Integral de Programas Sociales, abrieron la jornada.
El programa del primer día se organizó en tres paneles: 1) “Objetivos de Desarrollo Sostenible y Cadena de Valor. Oportunidades y Desafíos”; 2) “Sistemas de Gestión y Auditorías en la Cadena de Valor”; y 3) “Compras Sostenibles Públicas y Privadas”.
Los expositores que participaron fueron: René Mauricio Valdés, Coordinador Residente del Sistema de Naciones Unidas y Representante Residente del PNUD en Argentina; María Cornide, Secretaría de RSE, Cámara Argentina de la Mediana Empresa; Betina Del Valle Azugna, Gerente RSE, Grupo Sancor Seguros; Gustavo Molfino, Gerente de Producción, Cormorán; Luis Di Pietro, Coordinador de ODS, CNCPS; Ignacio Sabino, Responsable de Comunicaciones Corporativas, Henkel Argentina; Esteban Roni, Gerente de Desarrollo de Proveedores, Telecom Argentina; Cristian Perez, Gerente de Asuntos Públicos, Coca Cola Argentina; Flavio Fuertes, Punto Focal del Pacto Global Argentina, PNUD; Ivan Buffone, Director de Administración de Contrataciones, Oficina Nacional de Contrataciones, Ministerio de Modernización de la Nación; Nancy Álvarez, Directora Departamento de Aseguramiento de Calidad de la División de Tecnología y Negocios, ChileCompra, Ministerio de Hacienda (Chile); Cecilia Rena, Gerente Corporativo de Estrategias de Sustentabilidad, Arcor Argentina; Adriana Rosenfeld, Experta en ISO 26000:2010 y coordinadora del Subcomité de Compras Sostenibles, IRAM; y Fernando Passarelli, Coordinador del Programa Valor RSE+Competitividad.
La conferencia especial del 11 de mayo estuvo a cargo de Paloma Lemonche, Socia Directora de ACCIÓN49, consultora especializada en temas de RSE y cadena de valor, y se realizó bajo el título: “Oportunidades y desafíos de la gestión sostenible de la cadena de valor”.
La Jornada es parte del “Ciclo de capacitaciones en torno a la agenda 2030: desafíos y estrategias hacia un Desarrollo Sostenible” que AMIA organiza junto al el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales de Presidencia de la Nación.
Algunos conceptos y conclusiones que dejó el evento fueron los siguientes:
-La gestión sostenible de la cadena de valor es uno de los ejes centrales de la estrategia de Sustentabilidad que deben encarar las empresas para contribuir en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Estos 17 objetivos constituyen una hoja de ruta común, que hablan de cómo las empresas tienen involucrarse con los grandes retos mundiales de la actualidad.
-Tal como lo anuncia el ODS Nº17, es necesaria la construcción de alianzas para el desarrollo sostenible; hay desafíos que no los puede resolver el trabajo de un sólo actor.
-Es igualmente importante la responsabilidad de cada uno de los ciudadanos. Diariamente, tenemos oportunidades para ejercer un consumo responsable.
-Hay que incorporar a las pymes en estos procesos y mostrarles que mucho de lo que hacen día a día tienen que ver con la Agenda 2030. Por ejemplo, en la generación de empleo.
-Se destacó la territorialidad en las iniciativas. Es importante la creatividad y adaptación de los ODS a las necesidades y contextos específicos, para que las iniciativas globales no queden muy alejadas.
-Se destacó el concepto de “materialidad”, es decir, identificar los temas relevantes para el negocio, para luego alinearlos a los ODS. En este sentido, una importante función de Valor RSE+Competitividad, en la búsqueda de las mejores prácticas, es la de relevar en forma permanente experiencias de alineación a los ODS y su impacto en cadena de valor.
-Se compartió la importancia de trabajar la RSE extendida en la cadena de valor, no por moda o tendencia, sino porque así las empresas cuidan a su negocio y sus marcas. Invertir en el desarrollo de los proveedores ayudará a las empresas a cumplir con sus objetivos de sustentabilidad. Por el contrario, si se produce alguna práctica cuestionable asociada a un proveedor, los riesgos de ser identificado como co-participe son cada vez mayores.
-Se destacó el concepto de “esfera de influencia”, es decir, hasta dónde llegan los impactos de la empresa. En este sentido, lo que haga cualquier proveedor que tiene una relación directa con la marca, influye sobre ella. La empresa es responsable de esas actividades y, por ello, es preciso monitorear y auditar a los proveedores, pero acompañarlos de igual modo en su desarrollo.
-El gran reto para la gestión sustentable de la cadena de valor es que generalmente ésta involucra a muchos proveedores, llegando incluso a decenas de miles en algunos casos, y muchos de ellos situados en países de riesgo. Ahora bien, existen también oportunidades: gestionando la RSE en cadena de valor se pueden desarrollar grandes oportunidades de negocio, y fortalecerlo. También permite forjar alianzas de alto impacto social. En suma, hay que trabajar tanto en la prevención de riesgos como en identificar oportunidades de negocios. Herramientas como las normas ISO y los ODS, sirven para ello.
-Se explicó la nueva norma ISO 20.400 de Compras Sostenibles, lanzada en abril último, que contiene una serie de lineamientos y criterios de sustentabilidad a incorporar en los procesos de contratación. Esto se cristaliza en un uso más eficiente de los recursos, ya que la aplicación de estos criterios trae mejores resultados económicos. En este sentido, se observó que si hay una nueva norma hay que generar todas las herramientas necesarias para aplicarla. Aquí, la voluntad política es fundamental.
-De lado de los departamentos de Compras, se observó que estos no suelen tener objetivos de RSE, a pesar de ser los responsables naturales de aglutinar el valor de la cadena de aprovisionamiento. Con relación a este punto, es fundamental la profesionalización y la incorporación de una visión sustentable en esta área clave dentro de la compañía.
-Una prioridad en la agenda actual es la transparencia e información en el proceso de compras, vinculado con la igualdad de oportunidades, la inclusión y la competitividad de los proveedores. Para esto deben trabajar juntos todos los actores: sector público, el privado y la sociedad civil.
El cierre de la Jornada estuvo a cargo de Agustin Dellagiovanna, Director Nacional de Acreditación de Organizaciones Subsecretaría de Responsabilidad Social para el Desarrollo Sostenible; y Ernesto Tocker, Director del Servicio de Empleo de AMIA y de Valor, RSE+Competitividad.