Impulsar el avance desde la economía lineal hacia una economía circular, fomentando la transparencia de los procesos, la concientización y la reducción de costos es el objetivo de CircularChain, el ecosistema de colaboración que están desarrollando Ecoembes y Minsait para construir la plataforma blockchain de la economía circular en España.
Se trata de un proyecto que supuso un importante reto de innovación tecnológica y que tendrá un impacto notable en la sostenibilidad medioambiental. Esta red de registros distribuidos permitirá contribuir a que las administraciones públicas, las entidades locales, los operadores, los recicladores y otras organizaciones puedan compartir de forma segura y controlar todos los datos del sistema y acelerar todas las transacciones vinculadas al proceso de selección de residuos.
Además, va a posibilitar la implementación ágil de sistemas de auditoría inteligente a partir de los registros generados por todos los involucrados en la cadena, lo que permitirá demostrar que tanto las empresas como los gobiernos cumplen sus compromisos medioambientales en cuanto a la gestión de residuos, generando así sistemas de control medioambiental.
Por medio de esta tecnología, se va a disponer de una fuente única de información veraz y un registro inalterable, aportando mayor transparencia y capacidad de auditoría a todas las operaciones y transacciones que realizan los integrantes que participan en el ecosistema. Además, al no existir un sistema central, la plataforma carece de costos globales de desarrollo y de mantenimiento de la infraestructura, que son divididos entre los distintos participantes.
“Aprovechando el papel de facilitador que juega Ecoembes dentro de la economía circular, empezamos a crear un entorno de colaboración sobre el pilar de la transparencia y con una tecnología innovadora con el objetivo de ir involucrando al resto de los actores del proceso de selección, recolección y reciclaje para consolidar un ecosistema de referencia en el sector”, explican en Minsait.
CircularChain va a facilitar el registro de información inmodificable sobre la trazabilidad (identificador de recolección, planta, tipo de material, o posible disconformidad, entre otros) y de evidencias documentales que aseguran la existencia de un documento en un momento determinado y permiten probar si se producen modificaciones posteriores. Además, habilita el establecimiento de acuerdos inteligentes, por ejemplo, sobre entrega de materiales o envases, que facilitan la automatización de los pagos y penalizaciones en caso de incumplimiento.
Seguimiento en tiempo real
La iniciativa ya mostró sus beneficios a través del desarrollo de un caso de uso completo de trazabilidad, que está operando en el proceso real de recolección del material seleccionado desde las plantas, almacenando los datos relevantes de su traslado hasta las instalaciones de los recicladores y la información de su aceptación en el destino o apertura de un proceso de disconformidad, en caso de que el acuerdo no se haya producido.
Incluye el registro de centenares de transacciones diarias asociadas a la recolección de material en más de 90 plantas de selección y al traslado hasta más de 70 recicladores a lo largo de toda España. Las cifras de noviembre pasado suman más de 3.700 recolecciones y alrededor de 14.500 transacciones, que quedaron registradas en la plataforma blockchain.
“La plataforma facilita la gestión en tiempo real del proceso de recolección de envases, así como su seguimiento, también en tiempo real, por parte de los actores involucrados”, afirman en Minsait.
“Esta iniciativa supuso un desafío de innovación tecnológica y presenta grandes oportunidades y posibilidades de progreso futuras para incorporar más organizaciones y casos de uso y conseguir construir la red blockchain de la economía circular en España”, indican desde Ecoembes.
En este sentido, Ecoembes y Minsait destacan el valor que CircularChain aporta a las administraciones públicas “al facilitarles la consulta de su información, de manera auditada e inalterable, sobre los procesos de la economía circular y su integración en una red que fomente la colaboración público-privada y entre administraciones para avanzar hacia la sostenibilidad”. Además, afirman que contribuirá a dar respuesta a una ciudadanía con una demanda creciente de “soluciones más transparentes e innovadoras”.