El Convenio de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica define la biodiversidad como “la variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente, incluyendo toda la variedad de animales y plantas”.
Asimismo, la biodiversidad está conectada entre entornos y especies que dependen unos de otros para vivir. De esta manera, tiene un papel importante en la salud del planeta. El COVID-19 ha demostrado la importancia de su cuidado en la prevención de enfermedades transmisibles entre animales y humanos. Quedó expuesto que, si se continúa invadiendo ecosistemas frágiles, habrá un mayor contacto con la fauna silvestre, lo que permite que los patógenos de la vida silvestre se extiendan al ganado y a los humanos.
De manera positiva, el cuidado y la preservación de la biodiversidad ha aumentado, y esto se ha traducido en mayores iniciativas del sector privado para promover su cuidado. Así, Disney, Zurich, Ledesma, Unilever y Syngenta detallan sus compromisos y las acciones para lograrlo.
“Durante casi un siglo, en Disney hemos encontrado inspiración en las maravillas del mundo que compartimos y hemos emprendido acciones para crear un planeta más saludable para las personas y para la vida silvestre en todo el mundo. Eso incluye reducir nuestra huella ambiental, cuidar la vida silvestre y sus hábitats. Llamamos a estos esfuerzos colectivos ‘Disney Planet Possible’”, explica Leslie Huetter, Program Manager de Disney Conservation, The Walt Disney Company.
¿Tienen objetivos específicos de conservación de la biodiversidad?
Estamos explorando objetivos futuros en torno a la biodiversidad y acrecentando el trabajo de nuestro equipo. Desde 1995, el Fondo para la Conservación de Disney (Disney Conservation Fund, DCF) ha invertido más de 120 millones de dólares para ayudar a proteger más de mil especies, apoyar a los “héroes de la comunidad” y brindar millones de experiencias en la naturaleza a niños y niñas de todo el mundo.
¿La biodiversidad tuvo mayor impacto durante la pandemia o después?
El campo de la conservación siempre ha sido un desafío, y en muchos sentidos la pandemia los aumentó. Mientras que los encierros redujeron la contaminación del aire y la presión sobre la vida silvestre en algunos lugares, en otros pueden haber significado una reducción de los ingresos de la comunidad y de los programas de conservación por ecoturismo, viajes restringidos o pérdida de empleos para los conservacionistas y administradores de la vida silvestre, menos apoyo a los programas comunitarios que normalmente alientan el equilibrio entre los seres humanos y la vida silvestre, un aumento de la dependencia comunitaria de los recursos naturales o de las amenazas como la deforestación, la caza furtiva ilegal y la caza de carne de animales silvestres, ya que la gente buscaba fuentes alternativas de ingresos y de recursos. La pandemia ha reforzado las estrechas conexiones entre la salud humana, animal y ambiental, y es un área que sigue siendo increíblemente importante y relevante.
¿Qué acciones están emprendiendo acerca del tema?
Disney Conservation continúa evaluando cómo invertir fondos de manera significativa en organizaciones sin fines de lucro enfocadas en estrategias científicas e inclusivas para la comunidad, para garantizar un futuro para la vida silvestre y los lugares salvajes. Además, nuestro continuo apoyo a esfuerzos como el Programa de Respuesta y Preparación ante Crisis del Fondo Internacional para el Bienestar Animal (Fund for Animal Welfare Disaster Response and Preparedness Program) está ayudando a las comunidades a prepararse y recuperarse en situaciones en las que los animales necesitan más ayuda. También financiamos la regeneración y protección de los bosques y otras áreas naturales para reducir la cantidad de dióxido de carbono en la atmósfera y apoyar a las comunidades locales a través de la inversión en soluciones climáticas certificadas de alta calidad. Apoyamos proyectos escalables desarrollados utilizando protocolos revisados por pares basados en la ciencia y que resulten en reducciones de emisiones verificadas.
“El Fondo para la Conservación de Disney ha invertido más de 120 millones de dólares para ayudar a proteger más de mil especies”, Leslie Huetter, Program Manager, Disney Conservation, The Walt Disney Company.
“El cuidado del medio ambiente es fundamental en la estrategia de Zurich. Proteger el planeta y a la comunidad son nuestros dos grandes ejes rectores, enfocándonos en concreto hacia las problemáticas del cambio climático y la inequidad social”, indica Adriana Arias, Head of Communications & Sustainability de Zurich Argentina.
¿La pandemia impactó en sus políticas de ambiente?
Durante la pandemia, pusimos foco en dar respuestas a lo urgente, siempre cuidando a las personas, adaptándonos a lo que la nueva realidad exigía. Pero sin perder de vista el mediano y largo plazo. En ese sentido, nos dimos cuenta de que podíamos sostener algunas de nuestras actividades, llevando adelante acciones que fueron adaptadas a la virtualidad. Por ejemplo, realizamos capacitaciones con Cascos Verdes y la grabación de audiolibros con la Fundación Leer. Postpandemia, continuamos implementando nuestra estrategia de sustentabilidad con el propósito de ayudar a proteger el futuro de las personas. Creemos firmemente que podemos tener un impacto positivo desde nuestro rol como aseguradora, inversora, empleadora y en la comunidad.
¿Qué acciones están realizando vinculadas a la conservación?
Entre las acciones que llevamos adelante, uno de los proyectos es el del Bosque Zurich, lanzado a fines de 2020 en colaboración con Instituto Terra, que tiene como objetivo reforestar 700 hectáreas del bosque atlántico de Brasil y restaurar su biodiversidad. Este año, gracias a una activación sustentable que implementamos en Experiencia Casa Living, desde la Argentina aportamos con la donación de más de 5000 árboles al proyecto. A su vez, en 2021 formamos una alianza con Fundación Vida Silvestre Argentina, a través del apoyo a la Reserva Vida Silvestre Urugua-í, un área de alto valor de conservación en el bosque atlántico. Esta es una alianza sumamente importante, porque además de organizar nuestra operación según el Acuerdo de París para reducir la huella ambiental e incentivar las inversiones verdes, nos permite aportar soluciones concretas a los problemas medioambientales que sufre hoy la Argentina. También, este año llevamos adelante la Green Week, un programa que se realiza a nivel global a través de distintas acciones para colaborar y concientizar acerca del cuidado del medio ambiente.
“Proteger el planeta y la comunidad son nuestros dos grandes ejes rectores”, Adriana Arias, Head of Communications & Sustainability de Zurich Argentina.
“La conservación de las áreas naturales es parte de nuestra estrategia de negocio, porque entendemos que solamente así es posible lograr resultados sostenibles en el tiempo: producimos con la mejor calidad, preservamos los ecosistemas que nos rodean y cuidamos el bienestar de las comunidades donde estamos presentes”, detalla Marcos Uribelarrea, Director de Negocio Papel de Ledesma.
¿Tienen metas de conservación de la biodiversidad?
Nuestra actividad productiva se desenvuelve principalmente en las yungas del noroeste argentino, selvas subtropicales de montaña y una de las ecorregiones con mayor biodiversidad de la Argentina. Conscientes de nuestra responsabilidad, no solamente apostamos a mitigar el impacto que cualquier actividad productiva genera en el ecosistema, sino que además trabajamos para generar impactos positivos sobre el medio ambiente y su biodiversidad. Junto a la Fundación Proyungas hemos desarrollado el concepto de “paisaje productivo protegido”, que tiene como sustento de base la idea de que se puede producir en forma amigable con el medio ambiente. Algunas de las acciones que realizamos para lograr ese objetivo son: monitoreo ambiental, relevamiento de flora, monitoreo de cuencas, reducción de emisiones GEI –mediante un menor consumo de combustibles para las actividades de cosecha y transporte de caña–, reducción del ocho por ciento en el volumen de efluentes generados y menos emisiones indirectas derivadas del transporte de materias primas e insumos, así como de los productos finales desde el complejo hacia los principales centros de comercialización.
¿Fue un tema que ganó más relevancia durante la pandemia o después?
Sin duda la preservación del ambiente fue un tema que cobró relevancia ya en la pandemia: menos contaminación, canales transparentes, desfiles de animales por las ciudades… Y ahí, muchas empresas (y personas) que hasta entonces no habían prestado atención a estos temas, empezaron a tomar conciencia sobre su importancia porque vieron que el cambio era posible. Así, la pandemia puede pensarse como una oportunidad para construir una economía que cuide la salud del planeta; algo que Ledesma ya venía haciendo hace mucho.
¿Qué acciones están realizando en el tema? ¿Trabajan con organizaciones aliadas?
Siempre en alianza con otras organizaciones, por ejemplo, Iniciativa para la Creación del Parque Nacional Calilegua: en 1975 donamos 76.320 hectáreas para la creación del Parque Nacional Calilegua, que es el área más grande del país dedicada a la conservación y contemplación de las yungas, y la de mayor biodiversidad. En él habitan muchísimas especies; algunas de ellas, como el yaguareté, en riesgo de extinción. Otra iniciativa es Paisaje Productivo Protegido, que, como ya mencionamos, está elaborada en conjunto con la Fundación ProYungas. También participamos del Programa Conectando Empresas con los ODS del CEADS, y esta es una de las iniciativas que presenta para contribuir al ODS 15.
En conjunto con la Fundación ProYungas, además, fuimos la primera empresa argentina en realizar un Plan de Ordenamiento Territorial (POT), que consistió en determinar qué sectores de sus áreas productivas podían destinarse a producción agrícola y cuáles debían preservarse. Como consecuencia de este plan, protegemos como reserva natural 100.000 de las más de 150.000 hectáreas que tenemos en Jujuy. El POT cuenta con la aprobación de la provincia de Jujuy, la Administración de Parques Nacionales, la Fundación Vida Silvestre y Greenpeace, entre otras organizaciones.
“Trabajamos para generar impactos positivos sobre el medio ambiente y su biodiversidad”, Marcos Uribelarrea, Director de Negocio Papel de Ledesma.
“Knorr tiene el propósito de inspirar a las familias a comer mejor y más variado, buscando acercarnos a una mejor alimentación para todas las personas, y eso incluye la naturalidad de sus productos y, por lo tanto, también el cuidado del medio ambiente”, comenta Natalia Giraud, Head de Asuntos Corporativos de Unilever. En este marco, Unilever se desempeña desde hace diez años bajo los principios de su Código de Agricultura Sostenible. Este año, con el apoyo del INTA –entidad con la que trabaja hace más de 30 años– y también con Knorr, se compromete con la Agricultura Regenerativa, desarrollando así un nuevo sistema de prácticas agrícolas para sus cultivos en la provincia de Mendoza. “Estas nuevas iniciativas tendrán un impacto positivo no solo en la producción de sus vegetales, sino también en las comunidades de la zona, la salud del suelo, la biodiversidad, la calidad del agua, la resiliencia climática y la rentabilidad agrícola”, agrega Giraud.
¿Tienen metas específicas de conservación de la biodiversidad?
La biodiversidad es una de las estrategias de agricultura regenerativa. Los ecosistemas apoyan la estabilidad climática, el abastecimiento de agua, estructura del suelo, control de plagas y enfermedades. Pero se están degradando a un ritmo sin precedentes. Por eso estamos comprometidos a: ayudar a proteger y regenerar 1,5 millones de hectáreas de tierra, bosques y océanos para 2030; abastecimiento 100 por ciento sustentable de nuestros cultivos agrícolas clave; y empoderar a los agricultores para proteger y regenerar los entornos agrícolas.
¿Se realizó mayor hincapié en la biodiversidad luego de la pandemia?
La pandemia evidenció la necesidad de un compromiso sostenido, de acciones urgentes, nos enseñó a accionar de manera comunitaria, trabajando más cerca de las comunidades. Las empresas tenemos un rol más que relevante y es importante ser conscientes de esto y tomar cartas en el asunto. Aquellas empresas y marcas que puedan adaptarse a las necesidades cambiantes de los consumidores, y que contribuyan a afrontar los retos del cambio climático y la desigualdad social, tendrán un mayor reconocimiento que se verá reflejado en el desarrollo del negocio.
¿Qué acciones están realizando en cuidado ambiental y conservación?
Desde hace más de 30 años, Unilever realiza un trabajo colaborativo junto al INTA fomentando la adopción de nuevas tecnologías y programas de apoyo a los pequeños productores de fincas ubicadas en las zonas de Mendoza, San Juan y Córdoba. Además, nos aliamos con la escuela de graduados de la Facultad de Agronomía de la UBA para que sus expertos nos acompañen en el módulo de Agricultura Regenerativa de UniPyME, un programa de capacitaciones gratuitas que brindamos para pymes.
“Estamos comprometidos a ayudar a proteger y regenerar 1,5 millones de hectáreas de tierra, bosques y océanos para 2030”, Natalia Giraud, Head de Asuntos Corporativos de Unilever.
“Nuestra ambición en Syngenta es ayudar a alimentar al mundo de manera segura mientras cuidamos el planeta. Para esto, nuestro objetivo es mejorar la sustentabilidad, la calidad y la seguridad de la agricultura con ciencia de clase mundial y soluciones innovadoras para los cultivos”, afirma Guillermo Delgado, Gerente de Negocios Responsables y Sustentables de Syngenta para Latinoamérica Sur. A través de una alianza con The Nature Conservancy (TNC) ayudan a los productores a promover la convivencia entre la conservación y la producción, identificando e implementando buenas prácticas agrícolas en el Gran Chaco. El proyecto está diseñado para restablecer y preservar el hábitat forestal, que ayuda a regular el ciclo de nutrientes y plagas, protege la zona de erosión del suelo causada por el viento, capta carbono y mejora la calidad del agua dulce.
¿Es un tema que ganó más relevancia durante la pandemia o después?
La biodiversidad fue ganando relevancia los últimos años, ya que los productores entienden su importancia; no es un tema que surgió con la pandemia. Es importante destacar que desde Syngenta fuimos pioneros en promover la biodiversidad en las áreas agrícolas, mediante alianzas con el Conicet en los años 2012-2013.
¿Qué acciones están realizando?
Mediante nuestro programa Paisajes Multifuncionales, activo desde 2015, buscamos constituir espacios que actúan como refugios de biodiversidad y ofrecer a los productores agrícolas una herramienta concreta para alcanzar una agricultura sustentable y regenerativa. Su principal objetivo es incrementar la presencia de polinizadores e insectos benéficos en las zonas de los cultivos de producción, a partir de la creación de áreas específicas para el crecimiento de especies nativas y naturalizadas en los márgenes de los campos agrícolas. De este modo, los refugios de diversidad que se generan proveen espacios libres de cultivo para el crecimiento espontáneo de vegetación, asegurando hábitats y fuentes de alimento para la vida y el traslado de la fauna y flora silvestre. Cuenta con el soporte de investigadores del Conicet y de universidades de diferentes provincias. Desde entonces, hemos podido observar un aumento en la abundancia y la riqueza de los polinizadores en las parcelas con vegetación espontánea, así como también lograr el incremento de cultivos. Actualmente, en la Argentina contamos con más de 40 refugios de biodiversidad implementados en ocho provincias, logrando un alcance de 46.268 hectáreas beneficiadas. Este año inauguramos un espacio de biodiversidad en el Paseo del Viento, ubicado en el Parque Natural La Lucila, en Vicente López, con el objetivo de que los ciudadanos también puedan entender la importancia de contar con estos espacios en las áreas urbanas y cómo se conectan entre sí, además de colaborar en el incremento de especies benéficas para el ecosistema. A la vez, ayudan a la reducción del carbono y permiten aprovechar la belleza del contacto directo con la naturaleza.