Recientemente se celebró en París la XXI Conferencia sobre el Cambio Climático (COP21), encuentro que convocó a más de 150 líderes de todo el mundo para debatir sobre las consecuencias ambientales que sufre en la actualidad nuestro planeta, producto de la constante emisión de gases y el efecto invernadero.
El resultado de esta cumbre dejó un saldo positivo y esperanzador. A través de un pacto global denominado “Acuerdo de París”, los países participantes acordaron reducir sus emisiones de carbono “lo antes posible” y hacer todo lo necesario para mantener el calentamiento global “muy por debajo de 2 °C”.
Estamos ante un hecho histórico que puede cambiar el futuro de todos nosotros y el de las futuras generaciones. Las inundaciones en el norte del país, al igual que otras tantas catástrofes naturales que han ocurrido en el último tiempo, no son casualidad.
El 2016 comienza y trae consigo nuevos aires. La confianza de volver a creer y confiar que es posible construir un mundo mejor. En este pacto, participamos todos.