Carlos Álvarez, CEO para la Argentina y responsable para todo el sur de Latinoamérica de Philips, nos explicó el giro que hizo la compañía a nivel mundial desde el área del entretenimiento hacia la de la salud, bajo el concepto de “Health Continuum”.
¿Qué piensa Philips de la responsabilidad social empresaria?
La RSE es algo que Philips practica no solo en la Argentina, sino mundialmente, en cada uno de los países donde se encuentra. Nuestra casa matriz nos baja lineamientos y nosotros los adaptamos a las necesidades locales, buscando siempre poder devolver a la sociedad parte de lo que la empresa recibe.
¿En qué momento Philips hizo ese giro tan rotundo hacia el cuidado de la salud?
A principios del año 2000, Philips empezó a repensar su estrategia, a revisar su futuro, a hacer todos esos análisis que mencionaba antes de ver para dónde van la población y el mundo. Philips es una empresa que se autodefine y que se muestra absolutamente innovadora, tiene más de 120.000 patentes, entre las que se encuentran hitos como el casete, el CD y el DVD. Y cuando uno se encuentra en la innovación, necesita estar en la cresta de la ola de la tecnología. Hace ya más de una década que empezamos a tomar decisiones trascendentales en este sentido. En ese momento, teníamos un área de entretenimiento que incluía televisión y audio; otra muy importante de iluminación. Esos negocios eran los más destacados de la compañía. Después, contábamos con los de pequeños electrodomésticos y cuidado de la salud. Entonces decidimos salir del área del entretenimiento, pues si bien era superimportante, no iba a ser parte del core de Philips. Lo mismo ocurrió con el área iluminación, a pesar de que Philips trabajó mucho para reconvertirla con el objetivo de lograr hogares más cálidos. Hoy la compañía tiene equipamiento médico, cuidado de la salud y pequeños electrodomésticos. Estos últimos forman parte de lo que nosotros llamamos nuestro “Health Continuum”. El Health Continuum arranca con la vida en el hogar, en donde tratamos que las personas tengan acceso a productos que les permitan desarrollar una vida confortable y sana. Ahí encontramos los pequeños electrodomésticos, que van desde el cuidado personal, pasando por la vida saludable (como una freidora que no usa aceite o una máquina que hace sopa), hasta el área de diagnóstico médico. Después, la parte de tratamiento también es superimportante, porque si a uno le diagnostican algo, después hay que tratarlo, entonces ahí tenemos productos para hacer procedimientos mínimamente invasivos en las áreas de cardiología y oncología. Y luego vuelve la persona a su hogar para recuperar una vida saludable, por eso hablamos del “continuum” de la salud. La persona hoy mira con mucho detenimiento su salud, hace deportes y toma un mayor contacto y conciencia del cuidado de su cuerpo, y valora su vida.
¿Cuáles son las políticas medioambientales de Philips?
Tenemos un departamento de calidad y regulación liderado por una persona que forma parte del Management Team de la compañía. Nosotros interactuamos directamente con muchas instituciones y nunca tenemos problemas ni los queremos tener. Hacemos auditorías proactivas. Estamos siempre a la vanguardia del cuidado ambiental.
¿Cree que el usuario final valora que los productos sean certificados y que las empresas se preocupen por el medio ambiente?
En el área de pequeños electrodomésticos son los más jóvenes quienes lo valoran, pues vienen con un sentido de la responsabilidad sobre el medio ambiente bastante elevado que nos pone a prueba, y está bueno que así sea. En los productos médicos, en los cuales está mucho más estandarizado el tema de la certificación, son los hospitales y los sanatorios quienes se autocertifican, exigiendo que nuestros productos cumplan normas de calidad.
¿Podría explicarnos brevemente el programa Mamis?
El programa Mamis es quizás uno de los más importantes en los que hoy estamos trabajando conjuntamente con OSDE y DIM, que es un centro de diagnóstico que nos provee de profesionales médicos. Contamos con el apoyo del Gobierno Nacional a través de su Secretaría de Bienestar Social. Es un camión que está recorriendo todo el país; arrancó en la ciudad de Buenos Aires y pasará por el conurbano, Salta y Tucumán, dentro de una agenda en la que visitará zonas abnegadas. Cuenta con un ecógrafo para realizarles ecografías a las madres y sus bebés. También vamos generando una concientización sobre la importancia de la lactancia materno infantil, y ahora estamos incorporando productos e información para el cuidado respiratorio de los chicos. Lo venimos llevando adelante con mucho orgullo y pasión, porque el impacto que tiene en la sociedad es altísimo.
Haciendo foco en los ejes de maternidad, primera infancia y nutrición, Philips Argentina continúa construyendo su compromiso social con la comunidad, alineado al concepto de “Health Continuum”. La compañía trabaja en conjunto con distintas organizaciones para contribuir al cumplimiento del tercer Objetivo del Desarrollo Sostenible que establece la ONU: garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades. Durante el primer semestre del año, en conjunto con la Asociación Civil Pequeños Pasos, Philips llevó a cabo la puesta en valor y el equipamiento de la cocina del centro de oficios de San Martín. Además, realizaron talleres de cuidados respiratorios en los centros de la institución en La Boca y San Martín con el objetivo de prevenir las enfermedades invernales. También donaron 180 chupetes para sus talleres de lactancia. Asimismo, donaron equipamiento para el área de lactancia del Hospital Zonal de Bariloche, colaborando en su proceso de convertirse en Hospital Amigo de la Madre y el Niño. Siguiendo esta línea, programaron actividades para la Semana del Prematuro (durante noviembre) junto a la Maternidad Sardá.