Pablo Sibilla, Director General de Renault Argentina, aborda las tendencias y perspectivas en el mundo automotor y la importancia que tiene para Renault estar cerca y brindar herramientas comprometidas con la sociedad y el ambiente.
Pablo Sibilla se sumó al equipo de Renault hace 25 años y ocupó diferentes cargos. Comenzó su carrera en la compañía como Controlador de Costos en 1994, en 2010 fue designado Director Financiero de Renault Argentina y en 2014 se desempeñó en la posición de Vicepresidente de Finanzas y Control para la Región América, cargo que ocupó hasta su actual nombramiento. Es también Presidente de la Fundación Renault, que trabaja con organizaciones de la sociedad civil de todo el país, acompañando con programas dirigidos a poblaciones vulnerables que promueven la inclusión a través de la empleabilidad.
Usted forma parte de Renault desde hace un poco más de 25 años. ¿Cómo describe su carrera dentro del grupo?
Comencé en Buenos Aires en el área de Compras y después fui trabajando en distintas áreas. Me fui a vivir a Brasil en el año 2000. De los casi 27 años que trabajo en Renault, más de la mitad de mi carrera la desempeñé en Brasil. Pasé por muchas áreas, por ejemplo, Ventas Externas y Finanzas, y la marea me trajo hasta el puesto actual.
Prácticamente hizo toda su carrera en esta compañía.
Efectivamente. Hoy no es tan común, las personas que me conocen me dicen “¿Cómo hacés para continuar tanto tiempo en la misma compañía?”, y la realidad es que en promedio he cambiado de puesto cada cuatro años y al mismo tiempo he cambiado de país, así que cada vez fue como empezar de nuevo, uno está aprendiendo constantemente.
Usted asumió como Presidente de Renault Argentina en enero de 2020. Dos meses después comenzó la pandemia en nuestro país, ¿cómo fue llevar adelante el liderazgo de la compañía en esos momentos tan difíciles?
Inicié en enero de 2020, mientras mi familia seguía viviendo en Brasil. Yo empecé a viajar, venía los lunes y volvía a Brasil los viernes. Con el inicio de la cuarentena, quedé del lado brasileño en marzo, y solo pude venir a Argentina en agosto, así que estuve manejando la filial junto con el equipo en formato home office desde marzo hasta agosto de 2020. Fue un desafío totalmente diferente. Por ejemplo, hicimos el anuncio industrial de la pick up Alaskan en forma virtual por Teams y por Zoom con los periodistas, conmigo estando desde Brasil.
Mirando la industria automotriz, ¿cómo se perfila Renault para los próximos años?
En la Argentina, la industria no va a escapar a la tendencia mundial, que es la electrificación de los vehículos. Hasta el año 2025 veo una hibridación muy fuerte en los motores, creo que la tendencia viene muy rápido. Los vehículos eléctricos vendrán fuerte en América Latina, un poco más tarde que en Europa. En la Argentina fuimos la primera automotriz en comercializar vehículos eléctricos con el Kangoo en 2018, y somos líderes en ventas de ese tipo de vehículos eléctricos. Es una tendencia mundial que no tiene vuelta atrás. En su mix de ventas, Renault espera comercializar un 65% de vehículos eléctricos hasta 2025 y 90% hasta 2030, y esta tendencia se verá también en América Latina. El primer cliente natural para este tipo de vehículos fue el corporativo. Ahora estamos en camino hacia comercializar en un futuro próximo el Megane I Tech, el que tuvimos oportunidad de mostrar acá en Argentina. Fue el único país en América Latina donde pudimos mostrarle el vehículo a la prensa, ya que el aviso comercial se filmó aquí y organizamos un evento en este edificio. Creemos que en poco tiempo podremos lanzarlo, es un vehículo 100 por ciento eléctrico para clientes. He tenido la posibilidad de usar cotidianamente un vehículo eléctrico en Brasil y la verdad es que es una experiencia de usuario muy agradable.
La sustentabilidad es transversal en la gestión de Renault. Esto se ve en la estrategia Renaulution, que presentaron hace dos años, y en el plan de lanzar 13 nuevos modelos 100 por ciento eléctricos para 2025. ¿Qué significa Renaulution para ustedes como una marca global? ¿En qué medida cree que van a revolucionar el mercado automotor de la región?
Es una revolución global. La compañía pone la sustentabilidad en el core business y esto representa mucho. Renault hizo un cambio de lo que es el valor para el cliente. La empresa se reorganizó en cuatro marcas: Renault, la marca a la cual pertenece Argentina y América Latina; una segunda marca, Dacia, que es movilidad más accesible con robustez; Alpin, más deportiva, que es la que Renault decidió posicionar como referente para Fórmula Uno; y Movilize, que es una empresa a término futuro que representará el 30 por ciento de sus revenues, será una empresa tecnológica que brindará servicios de movilidad y otros no necesariamente ligados al mundo del automóvil. Dentro de esta estructura, vemos la sustentabilidad en el core business. Nuestro objetivo es cuidar no solo a nuestros clientes en relación con la seguridad de nuestros vehículos, sino también a nuestros empleados que fabrican los vehículos y al medio ambiente.
¿Cómo está conformado el equipo de personas de Renault en Argentina?
Somos poco más de 2000 personas distribuidas en este edificio de Palermo, en la ciudad de Buenos Aires, y en nuestra fábrica Santa Isabel en Córdoba. Esta última tiene 67 años de historia ininterrumpida en Argentina y ha producido más de 34 modelos desde que comenzó. La fábrica Santa Isabel nos llena de orgullo, porque consideramos que es la cuna de la industria automotriz en Argentina, con la fabricación de autos icónicos como Torino, Jeep, Renault 12, Renault 4, Renault Fuego, entre otros.
¿Qué acciones han llevado a cabo relacionadas con inversiones significativas dentro del mercado automotor?
En términos de inversiones, la alianza Renault-Nissan ha sido muy significativa para lanzar hace un año la pick up de una tonelada, Alaskan. Desde 2018 la fabricamos para nosotros y para Nissan también. La alianza invirtió 600 millones de dólares. Somos la empresa que tiene el rango más amplio de vehículos fabricados en Argentina, con seis carrocerías. No hay otra automotriz que fabrique un rango tan amplio de productos. Con respecto al futuro estamos trabajando en proyectos muy importantes, uno es que la sede Argentina tenga un perfil exportador. Del volumen que hagamos, un 70 u 80 por ciento estaría destinado a la exportación.
Renault es la primera automotriz local en firmar las Weps de ONU Mujeres, ¿qué acciones se realizan para achicar la brecha de género dentro de la organización?
Renault Argentina fue la primera compañía en firmar el acuerdo con ONU Mujeres. Hace diez años que trabajamos con sustentabilidad. Dentro de nuestros empleados, el 10 por ciento son operadoras, y 20 o 25 por ciento del personal administrativo también son mujeres. En el tope de la organización, el 25 por ciento de los miembros del comité de dirección son mujeres, una de ellas fue promovida a Directora Financiera en un nivel regional. Cuando se analizan las empresas en Argentina, vemos otras organizaciones que tienen 40 por ciento de mujeres en la base y 1 por ciento en los comités de dirección. Nosotros sin duda tenemos mucho trabajo por hacer, porque nuestro objetivo es llegar a tener 50 por ciento de mujeres, pero cuando mirás hoy nuestra empresa, del 25 por ciento de mujeres que tenemos en la base 20 o 25 por ciento ya están también en la organización, es decir que hay un terreno despejado entre la base y la cabeza de la organización para que las mujeres lleguen.
¿De qué se trata el Proyecto Comunidad que lleva adelante Renault?
Este proyecto busca la inclusión social. Frente a desigualdades sociales tan fuertes, nuestra responsabilidad es trabajar y darle oportunidad a mucha gente de comunidades más vulnerables para que se desarrolle. Colaboramos en un barrio al lado de nuestra fábrica al que los vecinos llamaron “Renó” (en referencia a la compañía), y allí viven alrededor de 400 familias, muchas de ellas en situación de vulnerabilidad. Como parte de las iniciativas que llevamos a cabo allí, brindamos talleres para desarrollar el emprendedurismo. Por ejemplo, los paragolpes llegan con una tela de protección, nosotros les damos estos materiales a las personas que hacen los talleres de costura y les enseñamos a confeccionar prendas de abrigo. Además, hace poco estuvimos visitando el barrio con un merendero que se llama Las Soles, y se hicieron cursos de cocina. También estamos trabajando en nuevos cursos para realizar muebles con pallets. Como recibimos mucho material que viene en pallets, los donamos para que los alumnos de los talleres puedan diseñar muebles.
¿De qué se trata el programa Movilidad para la Inclusión?
Trabajamos con Gota, con Red de Activos y Rasti. En este proyecto –que tiene dos años–, personas con discapacidad intelectual arman diferentes kits que son comercializados en nuestra red de concesionarios. Generamos este trabajo para que ellos puedan armar los kits. El primer proyecto se llamó “El auto del campeón”, relacionado con el Super TC2000. El equipo de Sustentabilidad de Renault presentó el proyecto en Francia y ganó un premio internacional por la creatividad. El segundo lo hicimos con la pick up Alaskan y el tercero con el Torino. Nos da mucho placer, porque ayudamos a estas personas y al mismo tiempo hacemos algo lúdico y bueno para los chicos.
¿Qué otros proyectos relacionados con la responsabilidad social tiene pendiente llevar a cabo?
Una de las cosas en las que estamos trabajando fuertemente tiene que ver con el Instituto Técnico Renault, que cumplió 60 años. Dentro de la inclusión, uno de los aspectos fundamentales es la educación y dar herramientas a los chicos para que puedan crecer y desarrollarse. Este instituto es el único centro educativo que Renault tiene en el mundo. Posee un nivel académico muy bueno, es una referencia. Los egresados pueden entrar a universidades sin rendir examen. En este sentido, uno de los temas que me ocupa es trabajar con el equipo del instituto para hacer un plan de becas a fin de que chicos que no tienen acceso a este tipo de educación puedan estudiar con nosotros. Algunas becas también las da Renault, y otras personas que quieren hacer soporte para la sociedad. La parte educativa es fundamental si queremos que el país crezca más rápidamente y se desarrolle mejor.
¿Cuáles son las perspectivas de negocio?
Probablemente este año vamos a ir a dos turnos completos. Un 90 por ciento de lo que vendemos en Argentina se fabrica aquí. Estamos trabajando muy fuerte en dos proyectos. Uno es la explotación de litio: el 90 por ciento de los vehículos que Renault va a comercializar en 2030 será eléctrico. En el norte de Francia, Renault está haciendo una Gigafactory para producir sus propias baterías, y para eso necesita litio. La Argentina tiene litio de muy buena calidad, entonces estamos trabajando con el Gobierno nacional para ver si podemos hacer que Argentina sea una de las fuentes de litio para Renault, con volúmenes muy importantes de exportación a partir de 2024-2025. Otro proyecto muy importante es orientarnos a un perfil fuertemente exportador. El 70 por ciento de lo que se produciría sería exportado a varios países de Latinoamérica y también fuera de la región. La prioridad de los próximos dos años está centrada sobre esos ejes.