Starbucks anunció que implementará la eliminación progresiva de sus tradicionales vasos descartables a nivel global con el objetivo de llegar a 2025 con el uso integral de tasas reutilizables.
Los primeros pasos ya los empezó a dar con el programa Borrow a cup (tomá prestada una taza) que está siendo testeado en ocho mercados. A través de esta modalidad, un cliente puede llevarse una taza de una tienda dejando un depósito que después le es devuelto cuando entrega el envase en cualquier local.
En otras plazas, Starbucks ya está ofreciendo descuentos en sus bebidas a los clientes que se acercan a las tiendas con sus propias tazas.
“Nuestra taza es omnipresente y eso nos encanta”, dijo Michael Kobori, director de sustentabilidad de Starbucks al anunciar los nuevos objetivos ambientales de la compañía. “Pero también es este símbolo omnipresente de una sociedad desechable”.
El ejecutivo destacó que si bien muchos de sus vasos son reciclados, se trata de una solución imperfecta que no alcanza a eliminar la huella de carbono de la cadena.