Disco reafirma su apoyo al proyecto de Residencias Universitarias de la Fundación Sí, en Córdoba. La iniciativa destinada a jóvenes egresados de escuelas secundarias rurales o alejados de los centros urbanos, que no cuentan con los recursos materiales para poder llevar adelante sus proyectos de estudio.
El Proyecto de la Fundación Sí consiste en brindar alojamiento, alimentos, ayuda económica para la adquisición de material de estudio y viáticos a jóvenes de localidades rurales con escasos recursos, así como también asistencia médica, psicológica, psicopedagógica y de apoyo a quienes lo necesiten. Cuentan además con un equipo de voluntarios que ofician de tutores y voluntarios especializados que acompañan, asisten y orientan la trayectoria de los residentes en cada aspecto para alcanzar sus objetivos de estudio.
Este año, y con motivo del Día del Estudiante, Disco destacó el esfuerzo, la dedicación y el compromiso de los estudiantes para seguir adelante en estos tiempos. Por esto mismo, la empresa otorgó a los coordinadores diferentes productos de Cuisine&Co, para entregarles a cada alumno.
Camila Casas, estudiante de Abogacía e integrante del programa proveniente de La Posta, comentó: “El primer año es bastante duro, pero con ganas, valentía y esfuerzo se puede. Me imagino ejerciendo la abogacía tradicional en capital, aunque también volviendo a mi pueblo con un aspecto más familiar, con respecto a progresar y a crecer porque ahí están mis vínculos”.
Asimismo, Emanuel Bustamante, otro de los 40 integrantes del programa y estudiante de Ingeniería Agronómica oriundo de Cruz del Eje, agregó: “Primero me costó acostumbrarme a vivir con los demás chicos, pero después con el tiempo me fui haciendo amigos. Mis sueños son poder recibirme de mi carrera, para poder ayudar a mi familia, y empezar a ayudar en la Fundación Si”.
En las zonas rurales de nuestro país, los jóvenes se encuentran frente a tres grandes problemáticas: la escasez de oportunidades laborales, las grandes distancias desde sus lugares de origen hasta los centros de estudios y la falta de ingresos económicos suficientes para solventar la formación en la educación superior. Esto conlleva, claramente, a la frustración de sus sueños y al escaso desarrollo comunitario de sus parajes, ayudando a profundizar así la enorme brecha entre las zonas rurales y urbanas de nuestro país.
Disco continúa así apoyando el sustento de un programa clave para la educación en la juventud argentina, que le permite a estos jóvenes descubrir todo el potencial que poseen para así alcanzar sus sueños y ayudar a sus familias y comunidades. La felicidad de saber que confían en uno, que tienen fe, que apuestan a que lo logrará, es un incentivo enorme para que estos chicos no bajen los brazos y, siendo perseverantes, logren todo lo que se propongan.