Kantar compartió los resultados del estudio Sustainability Sector Index (SSI), realizado por la compañía en 32 mercados a través de entrevistas a más de 30 mil consumidores.
El proyecto tiene como objetivo analizar el espacio de la sustentabilidad a través del marco de referencia de los Objetivos de Desarrollo Sustentable de la ONU, para ayudar a las empresas a priorizar sus acciones en torno de las problemáticas asociadas. Argentina fue incluida en el análisis, con mil entrevistas a nivel nacional.
“La situación económica actual hace que, aunque el consumidor esté convencido de la importancia de su participación para concebir un mundo más sustentable, finalmente termine decidiendo por el precio más accesible”,observó Sebastián Corzo, Director de Marketing de KANTAR división Insights.
“Por otra parte, instalar nuevos hábitos lleva tiempo, por eso, aunque el 98% de los encuestados asegure querer un estilo de vida más sustentable, solo el 11% está cambiando realmente”, agregó.
Uno de los principales hallazgos indica que hoy los consumidores son más conscientes y están mejor informados (un 57% presta atención a noticias relacionadas con temas del medio ambiente), pero las prioridades cotidianas y el incremento en el costo de vida actúan como barreras para decisiones de compra sustentables: 71% de los consumidores dice que quiere ser más consciente del cuidado del planeta al momento de comprar, pero que termina priorizando los precios.
En paralelo, de acuerdo con los consumidores, las marcas tienen un rol clave para jugar, a través de la información clara acerca de sus iniciativas sustentables, y asegurando la disponibilidad de productos sustentables a precios razonables. Un 44% de los argentinos busca activamente marcas que sean responsables y éticas, y casi la mitad de los entrevistados (49%) asegura que dejó de comprar alguna marca por el impacto negativo de la empresa en el medioambiente o la sociedad.
Sin embargo, existe una brecha entre las actitudes y las acciones (Value-Action gap) que se observa de manera consistente en las diferentes generaciones: mientras el 98% declara que quiere adoptar un estilo de vida más sustentable, solo un 11% está cambiando sus hábitos. Las personas quieren comprometerse a implementar hábitos sustentables, especialmente cuando requieran menores esfuerzos o costos, pero los precios elevados y la falta de alternativas son las principales fricciones que desalientan la adopción de conductas sostenibles. ¿Qué elementos pueden ayudar a cerrar la brecha? Un incentivo explícito de parte de las marcas, un beneficio concreto o una mejora en la experiencia.
El estudio incluye un análisis de segmentación, a través del cual se encontró que un tercio de los consumidores pertenece al segmento de Activos: aquellos que tienen un alto nivel de consciencia y compromiso para llevar adelante acciones sustentables. Los activos se destacan por estar muy informados y prestar atención a las acciones de las empresas. Sin embargo, los segmentos de mayor tamaño son los Believers y Considerers, que en conjunto representan casi el 60% de los argentinos. Se trata de personas que, si bien son conscientes de su rol, necesitan incentivos más tangibles para involucrarse con la sustentabilidad y elegir alternativas nuevas con mayor frecuencia.