Natura basa todo su poder en un factor esencial del ser humano: su capacidad de interrelacionarse para cocrear una realidad superadora de la existente. Diego de Leone, Gerente General de Natura Argentina, sabe que nada sería posible sin la potencia de su equipo.
¿Por qué creés que te eligieron para ocupar este cargo?
Creo que tenía el perfil que estaba buscando Natura en ese momento, que era cuando inició seriamente el desarrollo de sus operaciones internacionales basadas en la Argentina, pero la elección inicial es solo la primera etapa de un enamoramiento, y creo que fuimos construyendo, a través de estos años, una historia en común entre lo que era y es mi propósito y el de Natura.
¿Cuáles son esos propósitos compartidos?
Natura es una empresa que te permite identificarte rápidamente con muchas de las cosas que hace. Nuestro principal propósito, y acá te hablo del de ambos, es promover una mejor forma de vida, una manera superadora de hacer negocios, que transmita y promueva un impacto positivo en toda la sociedad. Queremos ser agentes de transformación y generar un cambio verdadero.
¿Cómo se manifiesta la RSE en Natura?
En Natura consideramos que la RSE es solo una parte de un concepto mucho más amplio que es la sustentabilidad, la cual vivimos a diario desde cuatro aspectos: económico, social, ambiental y cultural. Trabajamos en una interconexión y un equilibrio constantes de estos pilares, buscando más equidad, democratizando nuestra propuesta, haciendo eco de las causas que hoy tiene la sociedad, ya sea que ellas tengan que ver con la inclusión o el valor que la gente le da a la manera en la que elaboramos nuestros productos o de qué manera se utilizan. Tratamos, a través de todo lo que hacemos, de tomar una posición clara que refleje toda nuestra filosofía corporativa.
¿Cómo viven en Natura el tema de la inclusión de la mujer tan en la vidriera hoy día?
Surge de manera natural porque el 70 por ciento de nuestros colaboradores son mujeres, esto es más la regla que la excepción en nuestra compañía. Estamos muy orgullosos de eso. Y la gran parte de nuestra red también son mujeres. La inclusión es saber escuchar porque la innovación, las ideas, las propuestas, la disrupción, no va a venir de mí, va a venir de cualquier lado de la organización: hombre, mujer, familias. Incluso te diría que, en mi posición, lo que estoy tratando de hacer, cada vez más, e desaprender muchas cosas que llevo conmigo para intentar incorporar lo nuevo, romper paradigmas preestablecidos. Las nuevas generaciones y la diversidad que tenemos hoy en Natura nos permiten incorporar para aprender cosas distintas que agreguen más valor a la compañía.
Desde su web corporativa hablan de estimular el “consumo consciente”, ¿a qué se refieren?
Por “consumo consciente” entendemos que los consumidores sepan de dónde vienen los productos que consumen: de qué forma fueron extraídos los materiales que son parte de ese producto, cómo se hicieron, si fueron testeados en animales o no, con qué causas sociales se identifica la marca o la empresa, qué tiene que decir al respecto de las cosas que para el consumidor son importantes. Ese es un “consumidor consciente”, el que abre los ojos. Nosotros no queremos convencer a nadie. Lo que queremos es consumidores que entiendan y que logren tener visibilidad para que tomen las mejores decisiones de consumo posibles.
¿En qué consiste Creer para Ver?
A mí me gusta contar no tanto sobre el impacto ambiental de la sustentabilidad, sino que me gusta mucho contar la historia de su impacto social, por eso lo primero que te conté es que para nosotros la RSE está incluida en el concepto amplio de sustentabilidad. Estamos convencidos de que para transformar una sociedad hay que trabajar sobre la educación, que es un pilar básico. Es por eso por lo que tenemos una línea de productos no cosméticos que se llama Creer para Ver, de la cual el ciento por ciento de lo que se genera (lo que ganaría Natura y lo que ganarían las consultoras de belleza) es destinado a proyectos de educación. Trabajamos con el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) en uno de estos proyectos y con el Instituto Natura, que es una ONG que se fundó este año en la Argentina, en distintos proyectos de educación. El principal programa que tenemos se llama Comunidades de Aprendizaje. Ya llegó a varias provincias e impacta en más de 5 mil escuelas y más de 300 mil alumnos. Te diría que 1 de cada 10 escuelas públicas del país está impactada por este programa. Y ya es política pública en Salta y Santa Fe.
¿Qué nos dirías para convencernos de sumarnos a esa red de Natura?
Nos gusta decir que trabajar en Natura es diferente porque termina apasionándote. Tenemos muchas políticas que nos ayudan a disfrutar de lo que hacemos: para quienes van a ser padres, licencia por paternidad de 40 días, licencia extendida para madres, licencia por violencia de género, créditos personales, viernes y horarios flexibles, traslados, comedor, merienda, snacks, masajes, ping-pong, metegol y hasta Play Station. Pero lo principal, y más allá de todos los beneficios que te acabo de nombrar, es que en Natura estamos realmente identificados con el propósito y con lo que esta empresa viene construyendo desde hace años. Es fantástico poder hablar de Natura, de tu trabajo, con pasión; contarles a tu familia y amigos lo que estás haciendo acá. Sentir que generamos una diferencia positiva para nosotros, para nuestras familias y para toda la comunidad. Por todo esto, yo te diría que te sumes a la red de Natura.