Creando Conciencia construyó una huerta de madera reciclada en un comedor de Tigre

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Creando Conciencia, la cooperativa conformada por ex cartoneros, dedicada al cuidado ambiental e inclusión social de sus miembros, fue seleccionada, por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo sostenible, a través del programa Casa Común, para construir una huerta de madera plástica reciclada y dar capacitación ambiental a los integrantes del merendero Tino, al que asisten diariamente casi 200 personas en Tigre. El proyecto implica, además de la provisión de materiales y armado de la huerta, la presencia de 5 promotores ambientales de la cooperativa en el lugar, para capacitar a los vecinos en la generación de alimentos saludables y orgánicos, a partir de la huerta.

Para ello, Creando Conciencia presentó un proyecto, que se inscribe dentro de la línea Promoción de la valorización de residuos orgánicos e inorgánicos, dentro del programa Casa Común, dependiente del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible. Casa Común es un plan integral que brinda asistencia técnica y financiera a gobiernos locales y organizaciones comunitarias para la realización de proyectos ambientales con impacto social.Se trata de un esfuerzo por atender demandas concretas de los sectores más postergados, generar puestos de trabajo y alentar nuevas formas de producción y consumo a partir del desarrollo de iniciativas socioambientales.

Más allá de este proyecto, la cooperativa Creando Conciencia ya viene colaborando, a través de la provisión de comida y mercadería desde 2017 con el comedor Tino, de Tigre, que se encuentra emplazado en una de las zonas más vulnerables del partido. Si bien originalmente era un comedor para niños, en la práctica 150/200 personas de diferentes edades son asistidas por él. Algunos van a comer allí y otros reciben las viandas en sus casas, para evitar contagios.

La huerta, que se instaló allí, forma parte de la unidad de mobiliario urbano de la cooperativa, en la cual además se producen bancos, mesas, reposeras y otros objetos, siempre a partir de madera plástica reciclada, que permite tener un aspecto similar a la madera y la posibilidad de estar a la intemperie sin deteriorarse.

“Allí se resume lo que hacemos, ya que separamos, reciclamos y transformamos, apuntando al cuidado del medio ambiente y al mismo tiempo ofreciendo una mejor calidad de vida a nuestros integrantes”, señaló Noelia Segovia, presidenta de la cooperativa.

“En el caso del comedor Tino, se da una confluencia entre Estado, cooperativismo y sector privado, que resulta alentadora, ya que allí el Estado brinda el Programa Casa Común, nosotros el trabajo y el soporte, y Banco Credicoop aportó plantibnes para la huerta”, señaló Ramiro Martínez, uno de los fundadores de la cooperativa y presidente de la Confederación Argentina de Trabajadores Cooperativos Asociados (Conarcoop).