Ball Corporation, empresa de envases sostenibles de aluminio, da un paso más osado a favor del medio ambiente: la compañía asumió la meta de reducir en un 55% sus emisiones de gases de efecto invernadero hasta 2030 y en un 16% la cadena de suministro. El compromiso está avalado por Science Based Targets, iniciativa internacional que establece metas para la reducción de gases de efecto invernadero en las industrias, formada por Carbon Disclosure Project (CDP), United Nations Global Compact, World Resources Institute (WRI) y World Wide Fund for Nature (WWF).
Entre los envases para bebidas, la lata de aluminio ya es la opción más sustentable del mercado, siendo 100% e infinitamente reciclable. Para seguir contribuyendo y en el marco del Día Mundial del Reciclaje, Ball anuncia este compromiso, el cual acompaña a Science Based Targets para la medición con criterios establecidos, no solo para la neutralización de las emisiones, sino también en su reducción. Los planes de acción que se llevarán a cabo para este objetivo se dividen en distintas estrategias:
- Continuar aumentando el contenido de materia prima reciclada en la lata de aluminio. Actualmente, el 78% de las latas de Ball son fabricadas con aluminio reciclado, consumiendo solo el 5% de la energía eléctrica necesaria en comparación con el aluminio primario. En esa línea, se busca incrementar aún más este número.
- Optimizar los procesos para lograr mayor eficiencia de las plantas, por medio de la instalación de sistemas y máquinas inteligentes, reducción del consumo de energía, utilización de iluminación natural y reducción del consumo de gas natural en la producción, entre otras acciones.
- Mejorar la matriz eléctrica. Ball se propuso contribuir aún más con el medio ambiente y trabaja para que el 100% de la energía eléctrica usada en sus operaciones sea proveniente de fuentes renovables, como solar y eólica.
- Trabajar en conjunto con la cadena de proveedores para que ellos también reduzcan sus emisiones, especialmente en la industria de aluminio.