Desde Miami, Luz Gómez, Director Center for Inclusive Growth para Latinoamérica de Mastercard, dio una entrevista exclusiva para PRESENTE en la que abordó el propósito de los pilares del programa Doing Wel by Doing Good, destacó las alianzas concretadas por la compañía para llevar adelante el crecimiento inclusivo a nivel global y explicó los proyectos vigentes en términos de “cultura corporativa”.
¿Qué acciones de RSE y sustentabilidad realizó Mastercard en el marco de esta pandemia?
Voy a empezar con todos pilares donde trabajamos todo lo que refiere a sustentabilidad. Por un lado, el fuerte nuestro es el Crecimiento Inclusivo. El segundo es invertir en nuestra fuerza laboral, y la cultura de la empresa en términos de responsabilidad social que es muy importante para nosotros. Hablamos mucho de una cultura de decencia. El tercero es el cuidado al medio ambiente. Es un camino que estamos arrancando, pero con mucho compromiso. Y el cuarto estar bajo estándares éticos y responsables. Pero yo diría que el fuerte de este último es nuestro compromiso a la Data Resposability.
¿Cuáles son los puntos principales del programa Doing Well by Doing Good?
El primer pilar, el Crecimiento Inclusivo, es un crecimiento económico más equitativo y sustentable. Nuestro ciclo siempre sostiene que no podemos avanzar en un mundo que está fracasando. Entonces tenemos esa ambición de crear soluciones para muchos de los desafíos que hay por todo el mundo. Pero más que nada tenemos que ser ambiciosos en términos de tener objetivos. Hace poco alcanzamos la meta que nos pusimos de incluir financieramente a 500 millones de personas para este año. Pero queríamos ir más allá para llegar a un total de mil millones de persona y, además, 50 millones de pymes en todo el mundo para el 2025. También, incorporamos la perspectiva de género, lo que implicó el apoyo a 25 millones de mujeres emprendedoras con herramientas que necesitan para hacer crecer sus negocios. Trabajamos mucho, desde el lado de la filantropía, con instituciones académicas para estudiar soluciones prácticas para la inclusión financiera. Trabajamos, también, en un fondo de impacto a través del cual donamos más de 93 millones de dólares en 2019 para impulsar el crecimiento inclusivo por todo el mundo. Hacemos alianzas con ONG, con organizaciones de investigación para poder alcanzar el 1.5 millones de personas desde el lado de la filantropía.
¿Qué alianzas realizaron para llevar a cabo puntualmente el crecimiento inclusivo en Argentina?
En América Latina estamos trabajando fuerte en varias áreas. Por ejemplo, estamos tratando de abrir caminos a la digitalización. Trabajamos con entidades que están dando acceso a créditos, y en fortalecer las capacidades de las micro y pequeñas empresas y a los trabajadores de bajos recursos. Quiero resaltar tres aliados muy importantes para nosotros en América Latina. Por un lado, trabajamos con la Universidad INCAE de Costa Rica, que desarrollaron un programa para las mujeres que quieren tomar el próximo paso para hacer crecer su negocio. Lo que hicimos el año pasado fue desarrollar una plataforma digital para poder tener estos recursos a nivel regional para mujeres que querían hacer crecer sus emprendimientos. Otro socio clave es Fundación Capital. Trabaja desde hace más de diez años en programas con familias de bajos recursos por toda América Latina. Estamos desarrollando un proyecto que tiene que ver con la digitalización de procesos para pequeños comercios. También, llevamos a cabo un laboratorio de esfuerzos en esta área. Trabajamos, también, en cadenas de valor de la agricultura. El tercer aliado es la ONG Acción, quienes se dedican desde hace más de 50 años en el campo de inclusión financiera. Actualmente, trabajan con nosotros en un programa con instituciones financieras, y están colaborando en desarrollar mejores productos y servicios digitales enfocados en la base de la pirámide.
Dentro del pilar de lo que es el crecimiento inclusivo está la Data. Parte de nuestro ADN es formar alianzas en Mastercard y hace dos años se estableció un esfuerzo junto con la Fundación Rockefeller para avanzar en lo que se llama “Data Science para el impacto social”. Fundamos una organización nueva e independiente que se llama data.org; y realmente se puede concebir como una plataforma para formar alianzas para que las entidades puedan colaborar. Hace poco la organización hizo un concurso mundial para tratar de apoyar nuevas ideas de crecimiento inclusivo pero utilizando la Data.
¿Qué nos podés contar acerca de la llamada “cultura corporativa” de Mastercard?
En este segundo pilar de la fuerza laboral y cultura corporativa es sumamente importante. Mastercard ha sido muy generoso en ese sentido, en términos de la fuerza laboral. Contribuye, por ejemplo, un mínimo del 10% del salario base globalmente a los planes de sus empleados. Y los empleados participan. Esos programas están por encima del 91%. También, la empresa puso un enfoque en los empleados en términos de la adopción, el nacimiento y la maternidad. Cuando un hijo nace les otorgan, tanto al padre como a la madre, 16 semanas pagas de licencia. Creo que ese compromiso se vio antes del COVID y ahora, en tiempos de crisis, es muy importante para mantener cuidada a la fuerza laboral. Por el otro lado, en la cultura corporativa estamos fuertes en el sentido que la empresa nos ha apoyado mucho en dar más a la comunidad. Por ejemplo, 39% de los empleados colaboran con más de 3.400 ONGs; aportan 73 mil horas de voluntariado a tratar de apoyar diferentes causas, y la empresa te da como empleado cinco días laborales durante el año donde puedes usarlos para hacer este trabajo. Entonces no necesariamente lo tienen que hacer los fines de semana o las noches. La empresa siempre está empujando en hacer algo por la comunidad y yo creo que la gente lo reconoce. Muchas de las personas con quienes trabajo en la región siempre me están preguntando qué pueden hacer para el centro de crecimiento inclusivo, para apoyar a otras entidades ONGs. Entonces, es una cultura de cómo ser responsable dentro de la comunidad, ayudar con un poco de tiempo, dinero, y apoyar a una causa más grande que uno.
¿Cuáles fueron las acciones sobre el cuidado medioambiental que realizaron?
Primero, Mastercard fue el primero de la industria de pagos en recibir una aprobación que se llama Sciencie Based Targets Initiative (SBTi) para la actualización del objetivo de emisiones, para alinearnos a una trayectoria climática del 1,5 grados Celsius. Entonces, por un lado, queríamos alinear nuestros esfuerzos globales. Segundo, queríamos lanzar algo de nosotros. Armamos una Coalición de Priceless Planet, en enero de este año, antes de la pandemia, con la promesa de plantar 100 millones de árboles en los próximos cinco años. El tercero, es que Mastercard se unió a una entidad que se llama RE100 en donde estamos tratando de formalizar la utilización del 100% de energías renovables en todas las operaciones globales del 2020.
¿De qué se trata puntualmente el pilar sobre estándares éticos?
Un ejemplo, fue la presentación de la tarjeta True Name. Es una manera de facilitar la capacidad de los titulares de cuentas transgénero y no binarios, para que usen un nombre que sea auténtico con su identidad de género. Queríamos apoyar esos esfuerzos. Es muy único en la industria poder presentar esto en términos de línea de producto. Queremos respetar los derechos humanos para que se sientan bien viviendo su vida financiera con esta identidad.
¿Qué proyecciones tienen para lo que resta del año?
Por el lado filantrópico anunciamos una asociación con Bill y Melinda Gates y Wellcome, con la meta de acelerar el desarrollo y el acceso a tratamientos del COVID-19. Junto con esas empresas unimos 300 millones de dólares para financiación de los tratamientos. Además, donamos a varias iniciativas de la región para ayudar en temas de equipos de protección médica, de apoyar y combatir el hambre dentro de las comunidades de bajos recursos. Lo más fuerte es construir soluciones del lado del negocio. Por ejemplo, han aumentado muchos ataques cibernéticos entonces la empresa tuvo varias soluciones para reducir esta tendencia. Pero también, fue muy difícil para las pymes en esta crisis, entonces lanzamos una plataforma de aceleración digital para las empresas. La idea es que haya una coalición con socios locales para ayudar a los pequeños negocios en cada país. Un ejemplo en Argentina: Tienda Nube recientemente se sumó a la plataforma de aceleración digital y está ofreciendo beneficios exclusivos para las micro y pequeñas empresas, para que puedan vender online. En términos de las alianzas que nosotros llamamos Tech for Good, que reúne a líderes del sector privado. Tenemos algunos socios iniciales: Bacolombia; Banco Galicia, Mercado Libre, entre otros. La idea es poder hacer lo que nosotros llamados Private-Private Partnerships, para tratar de ir un paso más allá en la inclusión financiera porque sabemos que es un reto global tratar de incorporar gente al sistema financiero y no podemos hacerlo solos. La idea es sacar iniciativas particulares con una visión Tech digital dentro de esos proyectos y avanzar en conjunto.